El Ademar depende de sí mismo Krivoshlykov será revisado hoy

El tercer puesto se ve ya bastante más cerca. El Ademar sabía que el choque del pasado sábado ante el CAI Aragón era fundamental para sus aspiraciones de colgarse el bronce en la Liga Asobal, un puesto que permitiría al equipo leonés meterse la próxima temporada en la Liga de Campeones. Fue complicado -como se presup onía- pero tras un penoso comienzo, el equipo de Manolo Cadenas reaccionó, supo sacar su espíritu ganador y terminó venciendo, aunque con apuros a los maños por 34-36. Y la jornada pudo ser aún más redonda si el Barcelona hubiese pinchado en Arrate. Los azulgrana estuvieron a punto de caer en esa pista pero al final reaccionaron para vencer por un ajustado marcador: 27-28. Así las cosas, se mantiene la distancia de un punto que separa en la tabla al Ademar y a su empecinado perseguidor. Los leoneses tienen ahora mismo, a falta de dos jornadas, 45 puntos y los catalanes suman 44. Con los números en la mano, el Ademar depende de sí mismo para conservar esa tercera plaza que le da opciones de jugar la Champions la próxima temporada, la primera sin Manolo Cadenas en el banquillo tras doce años. Incluso les valdría el empate en el duro partido del próximo sábado ante el Portland. Los navarros siguen con opciones de ganar la liga aunque a nadie se le escapa que muy mal debería hacerlo el Ciudad Real en esta recta final para dejarse arrebatar el campeonato. Es más, puede llegar al último partido ante el Barcelona, con el título ya en el bolsillo. Y esta posibilidad preocupa dentro del Ademar por que se piensa que los manchegos podrían perder motivación en ese último choque ante el Barcelona. En cualquier caso, todo el mundo prefiere pensar que el Ciudad Real ganará en su feudo al Barcelona para redondear la conquista del título. El partido es importante para el Ademar porque en caso de un traspiés el próximo sábado ante el Portland San Antonio, la victoria del Ciudad Real volvería a colocarles en la tercera plaza. Por eso este encuentro es visto como una bala extra en la recámara leonesa. Sin embargo, sería muy deseable no tener que contar con ella.