La marea roja tiene el balón decisivo

Habrá quinto partido y será en el Palacio de Deportes. Nunca, a lo largo de los siete años de dura travesía por la LEB el equipo leonés estuvo tan cerca del ascenso. Nunca había llegado a sumar dos victorias en el play off definitivo para situarse a un solo triunfo de la ACB. Baloncesto León está a las puertas de la ACB y quien tiene la llave para traspasar el umbral es la Marea Roja. En el equipo lo saben y ayer la filo de la medianoche el mensaje era unánime: «hemos llegado hasta aquí y lo tenemos a tiro, pero ahora les necesitamos más que nunca». En la prensa de Zaragoza de ayer, en las horas previas al cuarto partido, el mensaje era único. Ni los jugadores, ni los directivos, ni el cuerpo técnico, ni los aficionados... nadie deseaba tener que jugársela en el Palacio de Deportes ante la Marea Roja leonesa. Y los jugadores de Gustavo Aranzana se lo ganaron ayer sobre la cancha y despertaron todos los «fantasmas» de un CAI Zaragoza que el año pasado vio como el Polaris World Murcia ascendía en el quinto partido en el pabellón Príncipe Felipe con el pívot estadounidense Rick Hughes, que este año está en las filas de su nuevo rival, Baloncesto León. Lo de anoche fue el triunfo del equipo sobre las estrellas y ahora más que nunca en el equipo leonés se considera que debe funcionar todo el equipo, incluida la afición, para conseguir mañana, sábado, el ansiado ascenso y poder acudir al filo de la medianoche a la plaza de San Marcelo 17 años y apenas seis después de aquel histórico 20 de mayo de 1990, cuando el centro de la ciudad se quedó pequeño para albergar a tantos aficionados. El club tenía ya preparadas las entradas y hoy mismo iniciará la ventaja a las doce de la mañana en el quiosco municipal de la plaza de Santo Domingo, ya que las taquillas del Palacio no están disponibles por un acto político. La venta será de doce a dos y desde las seis de la tarde. El club mantiene los precios de quince, doce y dos euros. Tampoco la cancha estará disponible, pero el León ha optado por dar la jornada de descanso a los jugadores, que durante la madrugada pasada regresaron desde Zaragoza, por lo que no están citados hasta mañana, sábado para preparar el decisivo encuentro que arrancará a las nueve de la noche. De momento nadie en el club quiere saber nada de posibles celebraciones si llega el ascenso. Aunque el factor cancha está recuperado y el partido decisivo se jugará en el Palacio existe un máximo respeto hacia el CAI y tanto el cuerpo técnico como los jugadores piden calma para preparar esta trascendental cita sobre la cancha. «Aunque estemos dos a dos ellos siguen siendo los mismos que nos han ganado dos veces y si no hacemos bien las cosas se nos puede escapar entre los dedos ese ascenso por el que hemos luchado tanto tiempo», aseguró ayer el secretario general Joaquín Rodríguez: «hay que tener la mente limpia de nuevo y pensar que tenemos por delante otro partido que jugar».