Los mejores y punto

En la calle, fue el más admirado. Llegó en un Porsche amarillo y se dio un baño de miradas en su corto paseíllo por la Calle Ancha hasta llegar al local de Estrella Galicia, donde le esperaban todas las cámaras. Trajeado, bronceado, desenfadado y campechano, se colocó bajo los focos con la naturalidad de quien está en su hábitat natural. José Manuel Estrada, más conocido como Pipi Estrada, fue el centro de todas las miradas hasta que empezó la I Gala del Deporte de Punto Radio León. En ese momento, tomó el relevo la antítesis de Pipi. El hombre que le sucedió en el protagonismo tiene en común con él sin embargo algo: como a Pipi, le quieren sus compañeros. Tímido empedernido, huyendo de los flashes, en atuendo informal, incómodo por tanta atención, el entrenador del Ademar, Manolo Cadenas, que se va de León, recibió la gran ovación de la noche. Un aplauso rotundo, cerrado, sostenido, unánime. Muy por encima del que se ganó el Climalia León. Y del que tuvo por parte del equipo de baloncesto leonés su todavía presidente, Fernández Llamazares, por su gesto de dirigirse directo y veloz desde el estrado de los premiados a la mesa donde cenaban los jugadores y todo el equipo técnico para ofrecerles, ostensiblemente, el galardón que acababa de recoger. En la gala organizada por la emisora Punto Radio de León para premiar a los deportistas leoneses se dieron cita los mejores. Y en una velada distendida dejaron claro que lo son dentro y fuera de las canchas. Por el ritual de recoger los premios y posar para los fotógrafos pasaron los futbolistas de la Cultural Fernando López y Diego Cascón, los jugadores del Climalia Juanjo Bernabé, Javier Bulfoni y Paolo Quinteros, el entrenador más exitoso de la temporada, Gustavo Aranzana, los jugadores del Ademar Óscar Perales y Héctor Castresana, el propio Cadenas o el ex presidente del Acis-Incosa, Agustín Montoya, que se fundió en un sentido abrazo con su sucesor, el ya ex diputado Enrique Gil. Después, la noche se llenó de anécdotas. El conductor de la gala, el periodista Juan Manuel San Martín, señaló que no se había invitado a ningún político -el jaleo del recuento de votos de las elecciones a la Diputación ha variado radicalmente en los últimos días y ha tardado cuatro días en ser definitivo y en el Ayuntamiento de León no se conoce aún el pacto de gobierno- y clarificó que Enrique Gil no estaba allí por su condición de político. Fueron entonces clarísimos los gestos de Héctor Castresana reivindicando que él sí lo es, porque el jugador del Ademar se acaba de ganar en las urnas el acta de procurador en la Cortes de Castilla y León por la UPL. Hubo risas generales. Y más cuando los periodistas, sentados en la mesa de al lado, le preguntaron si se iba a ir pronto a casa o prefería esperar allí un nuevo recuento de votos (los sucesivos escrutinios han dejado a la UPL sin dos de los tres diputados que se le había otorgado inicialmente). Antes de que cerrara la gala el director general de Punto Radio Castilla y León, Florencio Carrera, con un discurso muy emotivo que prometió ser breve y que luego no fue tanto (es de sobra conocida la facilidad de Carrera para hilvanar ideas y palabras), tomó la palabra el periodista Josep Pedrerol, director de Deportes de Punto Radio, para hacer una reflexión sobre lo mejor del deporte y lo mejor, también, del periodismo. «El deporte suma y no resta, se hace en equipo y no uno solo, muestra lo mejor de la persona y no sólo del deportista». Del periodismo dijo: «Me ha permitido conocer no sólo a los mejores deportistas sino a la persona que hay debajo de ese deportista». Y de lo mejor del periodismo, de lo mejor que debería tener: «Que no fuera hablar por hablar, sino pensar antes de hablar» y «mostrar lo mejor de los demás». Una fórmula que Pedrerol aplica con un éxito creciente en su programa de radio que, el jueves, al término de la gala, hizo desde la emisora de León. Con la complicidad de la noche, con Pipi y sin focos.