LUCHA LEONESA Y ALGO MÁS
El arropamiento de los demás
LO MISMO que no falló ni uno sólo de los luchadores seleccionados y convocados (sin premios en metálico y sin dinero alguno de por medio), así tampoco rechazaría la invitación ninguno de los deportistas leoneses de élite a quienes se dirigió la organización para arropar a la lucha leonesa en su homenaje. Muy al contrario, todos ellos sin excepción se sintieron muy honrados y se mostraron muy agradecidos. Total, propuesta halagadora para las gentes vinculadas al deporte de élite y unánimemente gratificante para los organizadores. Valoren ustedes mismos la respuesta en forma de presencia, de los demás deportes; de la sonoridad de los deportistas leoneses de élite. Javier Pascual, Senén Blanco, Margarita Ramos, Julio Requena, Juan Arias, Hermano Tomás (de los más aplaudidos y con su «deportivo» esguince a cuestas), Roberto Herreras, Gustavo Amanzana (muy de valorar y agradecer su esfuerzo la casi media noche anterior a un choque tan decisivo como ante el CAI), Álvarez Tomé, Narciso, Turienzo Álvarez, Valdés Sánchez, Celsa, Jorge Mata, Ruth Fernández, Jesús Quiñones (Bolo leonés), Guillermo del Riego y Ángel Muñiz Alique (innegables vínculos deportivo-luchísticos como autor del «escondido» monumento a la lucha leonesa). Dos salvedades, con su grado de comprensión y simpatía ante la desilusión. Para el excampeón de Europa Roberto Castañón, para quien un desajuste lamentabilísimo en el registro-protocolo impidió constatar su presencia e intervenir en las entregas de placas a los luchadores-. ¡Con la ilusión y gratitud con que acogió la invitación el bueno de Roberto! Mil disculpas de la organización para el bravo y simpar Castañón. Pocos con tantos merecimientos deportivos y tanta leonesidad por bandera como él. De otra parte el emblemático Luis Ballesteros haciendo filigranas para poder asistir. Partidos a las 11 y a las 12 de la noche con los chavales en el programa Espabila, sin que al fin le fuera posible acudir y con gran sentimiento por su parte. Asimismo, por sus peculiaridades hubo dos presencias que merecieron una presentación específica. «Hay un deportista canario que se hizo futbolista en León y ha echado raíces familiares aquí. Su tierra de origen y su tierra de adopción tienen en común sus luchas, la Lucha Canaria y Lucha Leonesa. Además es oriundo de Aruca, localidad de grandes luchadores canarios, en particular del gran Santiago Ojeda quien tras destacar en otras variantes de lucha como el sambo, al final se decantó por el judo y llegó a subcampeón de Europa en los años sesenta. Narciso Rodríguez Armas, para el fútbol leonés «Narciso» a secas, el bravo Narciso». «Asegura que fue antes luchador que ciclista. Nada extraño habiendo crecido en la luchística Ribera del Torío. Garrafe de Torío perdió un luchador de lucha leonesa, pero ganó un luchador del ciclismo, un corredor ciclista de la categoría de Senén Blanco». Existieron casos de imposibilidad física para estar en León esa noche. Manolo Martínez y Sergio Gallardo compitiendo al día siguiente en Herrera-Sevilla, Carlos Burón en una reunión de entrenadores en Madrid, Guanín desplazado con el Barcelona hacia tierras vascas, Manolo Cadenas y Castresana con el Ademar en Zaragoza, Rafa Guerrero en Mallorca donde tenía partido el día siguiente. Pues todos se brindaron encantados a grabar su mensaje de adhesión al homenaje, que iban saliendo por megafonía a la sala en el transcurso de la velada. Algunos de ellos -Carlos Burón- bastante críticos con la situación actual de la lucha leonesa y haciendo votos para que este homenaje sirva para aunar y sumar voluntades de cara a afrontar un futuro para la lucha leonesa con un enfoque de interapoyos y acción conjunta. Ante unas expectativas de futuro de lo más halagüeñas si se decide de una vez a apostar por la renovación y la modernidad, a tono con los demás deportes allí representados. Obviamente respetando las esencias y raíces que le son propias a la lucha leonesa. Una apuesta de futuro con la que también conectaría otro mensaje, el único no de deportista pero cuya comparecencia resultaba de lo más procedente y al mismo tiempo halagadora para la lucha leonesa según se desprendía de su presentación introductora «No es deportista, no es político, pero es el leonés más importante en este momento. Él es nuestro Leonés del Año, Cándido Alonso Hidalgo, que no pudo estar aquí porque precisamente a estas horas le están haciendo entrega de la Madreña de Oro por parte del centro Asturiano de Madrid. Respuestas de unos y otros, de deportistas leoneses de élite y de luchadores, muy a tomar en consideranción en cuanto a cómo se responde cuando lo que se solicita y se ofrece tiene sustancia y contenido. Actitud, pues, muy reveladora, muy a tener en cuenta para sacar conclusiones ante estas reacciones tan en positivo. No se está acostumbrado a ellas en la lucha.