SIN AFANES POLÉMICOS
Final de trayecto
ESTACIÓN Término. Final de trayecto. Parada y fonda para los jugadores, que no así para directivos y técnicos, quienes tienen que afrontar una difícil delicada tarea: la de formar las plantillas ideales para que cumplan los objetivos marcados. Broche de oro en el cierre para Ademar; valioso también para Climalia León; la Cultural se conforma con el bronce como cierre, y no precisamente por la dureza del metal, sino por el valor de la temporada y lo conseguido. Climalia León no pudo cerrar la temporada con el broche brillante -más efectista que efectivo- de la consecución del título de Campeón de la LEB. El Manresa, muy fuerte en los play offs, logró el galardón. Pero ello no resta si quiera un ápice a la gran conquista del ascenso. Ahora la tarea de directivos y técnicos consiste en formar una plantilla lo suficientemente fuerte como para conservar la categoría. Una tarea para la que hará falta dinero y suerte, que no sólo con sapiencia se logra tan difícil objetivo. La experiencia, madre de la ciencia, nos ha enseñado lo relativamente fácil que se pierde la categoría y lo difícil que se recupera. Nada más y nada menos que siete largos años caminando por el pedregal de la Leb. Ademar es quien tiene poco trabajo para completar la plantilla, en cuanto a jugadores. Las bajas de Raúl Entrerríos y Viran Morros pueden ser cubiertas por jugadores que permanecerán en el equipo. Vía libre para Óscar Perales, quien merecidamente va a estrenar la internacionalidad en la absoluta. Perales puede cubrir tanto el lateral izquierdo del equipo como el central, o sea la tarea que venía realizando Raúl Entrerríos; en cuanto a la tarea defensiva, en la que más y mejor se aplicaba Viran Morros, prácticamente está cubierta por Castresana, Aguinagalde y Sigurdsson, amén de la colaboración de otros compañeros, particularmente de Laluskas por su envergadura y dureza. El tercer lugar conseguido, a expensas del Barcelona, supone un gran compromiso para el equipo: la Liga de Campeones. La Cultural tiene una tarea densa y difícil. La renovación de la plantilla exige esfuerzo económico y una búsqueda minuciosa para conseguir acertar en la elección de los jugadores. El cansancio de los aficionados, con un largísimo tiempo de espera desesperanzada que se pierde prácticamente en el túnel del tiempo, no resiste ya proyectos a largo plazo. Para que la ilusión cobre fuerza y de la necesaria confianza, es necesario que, cuando menos, el objetivo del equipo sea estar entre los cuatro primeros.