Una temporada para no olvidar

El paso de la Deportiva por la Segunda División no ha podido saldarse de manera feliz. Sin embargo, el solo hecho de haber compartido categoría con muchos de los clubes más históricos del fútbol español ya merece la pena. Han sido tantos años esperando ver a la Ponferradina entre los mejores de España que la afición se ha tomado esta temporada como una fiesta, más allá del destino que aguardaba a los blanquiazules al final de la misma. Ni siquiera el descenso a Segunda División B ha podido evitar que los seguidores bercianos hayan apurado hasta la última gota del vaso para viajar hasta Vitoria y despedir como se merecía la categoría perdida. En realidad la temporada terminó como empezó, marcada por la fiesta. La misma que celebraba la llegada al fútbol profesional y que ahora también sirve para decirle adiós. Se pueden decir muchas cosas al respecto de lo acaecido este año en la Ponferradina, pero sin duda alguna la más positiva para la entidad estriba en el crecimiento experimentado por su masa social. Ha merecido la pena incluso por aquellos que no siendo socios, se han acercado por vez primera al estadio y eso les ha enganchado a la «causa» blanquiazul para el futuro. Ya se sabe que muchos se quedarán por el camino cuando la entidad de los equipos visitantes no les diga gran cosa y opten por el confortable calor del hogar despreciando una gélida tarde de fútbol invernal. Ellos se lo perderán. De cualquier manera, otros muchos seguirán empujando desde la grada, como lo han hecho esta temporada en espera de ver a su equipo otra vez en la lucha por la Segunda División. Ahora sólo queda el recuerdo y debe de seguir bien presente porque esta temporada, por más que se salde con un decenso, no es para olvidar, ni mucho menos. La primera estación de la Deportiva en Segunda División será siempre patrimonio de los que han tenido la fortuna de vivirlo. Y fueron muchos. También es verdad que no sería bueno tener que echar la vista mucho tiempo atrás para acordarse de una Ponferradina en Segunda. Si el azar devuelve a los bercianos a esa categoría en poco tiempo, quizá la memoria se nuble eclipsada por otros tiempos que se suponen más felices. Con independencia de lo que diga el futuro, esta temporada ya formará parte de la historia de este club y sus protagonistas aparecerán en sus páginas con letras doradas, igual que aquellos otros que hicieron posible el duro tránsito desde la Segunda División B. Son tantos los recuerdos que se agolpan en la mente, tantos buenos y no tan buenos momentos que se dibujan en la memoria, que resultaría imposible plasmarlos todos ellos en un par de páginas de periódico. Sin embargo, a modo de homenaje hacia el club y sus protagonistas, a los socios, a los aficionados y a los que no lo son, para todos vaya este pequeño testimonio gráfico. LA TEMPORADA DEJÓ DATOS CURIOSOS Kilómetros recorridos: Espectadores que vieron al equipo*: *Contando los de El Toralín y a domicilio Horas de viaje**: **Tanto en autocar como en avión