El Real Madrid despide a Capello y aplaza el nombramiento de Schuster

El Real Madrid hizo oficial ayer la destitución de Fabio Capello, tras concluir que su apuesta futbolística no es acorde con la historia del club y las exigencias de su afición, y pospuso el nombramiento de Bernd Schuster hasta que se desbloquee el conflicto de intereses entre el club blanco, el Getafe y el propio técnico alemán. El despido del entrenador italiano fue anunciado por Pedja Mijatovic después de que el director deportivo del Real Madrid presentase ante la junta directiva un informe desfavorable al italiano que, según la versión oficial, fue aprobado de forma unánime. Llama la atención esa supuesta unión de pareceres cuando, días atrás, algunos directivos ya comunicaron su apuesta por Capello. «Fabio ha trabajado bajo una enorme presión, ya que estuvo muy cuestionado todo el año por los seguidores y los medios de comunicación. El resultado es muy importante, pero estamos obligados a ofrecer un fútbol diferente para disfrutar del Madrid del futuro», se limitó a decir Mijatovic, quien lanzó balones fuera, desmintió estar dispuesto a dimitir por un problema de competencias con Miguel Ángel Portugal, nuevo secretario técnico, negó tener una mala relación con Schuster y eludió hablar de fichajes. Mijatovic confió en Capello hasta que hace tres meses supo que Ramón Calderón tenía decidida su destitución. Según fuentes del club, en su informe final propuso el adiós del italiano por el mal juego del equipo, sus problemas con el vestuario, personalizados en Helguera, Beckham, Ronaldo y Cassano, su mala relación con el público, al que incluso llegó a hacer gestos despectivos durante el partido contra el Zaragoza, y la soberbia mostrada tras ganar la Liga. Capello fue informado de su marcha a través de su hijo y abogado, y de su ayudante Franco Baldini, quien también debe abandonar junto a Italio Galbiatti, segundo técnico, Massimo Neri, preparador físico, y Franco Tancredi, preparador de porteros. Mijatovic explicó que no pudo localizar a Capello porque se encontraba de viaje y volando (de vacaciones en el Tíbet). Comienza ahora una negociación del finiquito que no se augura sencilla. El Madrid sólo está dispuesto a pagar uno de los dos años que le restaban de contrato, lo que supone nueve millones de euros brutos, y Capello ya ha dejado claro que no piensa perdonar ni un céntimo y reclamará dos temporadas. Si se suman el ejercicio ya remunerado, el finiquito de al menos otro curso más, el salario de sus colaboradores y la prima de unos 700.000 euros por ganar la Liga, Capello le habrá costado al Madrid unos 3.500 millones de pesetas. Sin prisa Sobre el futuro inquilino del banquillo, el octavo en poco más de cuatro años, Mijatovic fue todavía más escueto. Avanzó que hay varios candidatos que reúnen el perfil exigido y, sobre Schuster, subrayó que «reúne bastantes requisitos, pero tiene contrato con el Getate y, por respeto a ese club, no se hablará de él hasta que no se resuelva el problema». «No tenemos prisa para presentar al técnico y nos damos un margen de semanas», sentenció Mijatovic. Eso no quiere decir que el Madrid no esté trabajando ya en fichajes avalados por el germano. Real Madrid, Getafe y Schuster esperan un primer gesto para acercar posturas. El alemán tiene apalabrado un precontrato con los blancos desde febrero-marzo, que incluso establece una cláusula indemnizatoria de un millón de euros en caso de marcha atrás por alguna de las partes. Calderón quiere que el teutón y el club azulón resuelvan sus cuitas antes de anunciar a Schuster, que ha urgido al Madrid a mover ficha porque no quiere terminar mal con un club y un presidente que le brindaron una gran oportunidad. Ángel Torres, presidente del Getafe, está indignado por la forma de actuar de los blancos, insiste en que Bernd tiene un año más de contrato y recuerda que, el que lo quiera, tendrá que pasar por caja y abonar 400.000 euros. Tiene a Laudrup en la recámara y le encantaría que Schuster tendiera puentes con el Madrid. Desea un trato preferencial en cesiones y traspasos. Torres, socio del Madrid, no entiende, por ejemplo, que Mejía y Pavón se pasen un año marginados cuando al Geta le hubieran venido de perlas. Mijatovic y Schuster no tienen buen feeling y más aún desde que Zoran Vekic, el representante de Pedja, rompiera recientemente con el alemán. Por más que el balcánico asegurase ayer que siempre tuvieron una buena relación, la realidad le desdice. En verano, convenció a Calderón para que se olvidase del nibelungo , su preferido, y apostase por la experiencia y el carácter ganador de Capello. Y tras asumir que éste no iba a seguir, el director deportivo flirteó primero con Rafa Benítez, quien le dio calabazas, coqueteó después sin éxito con Mourinho y más tarde sacó a la palestra el apellido Laudrup. Mijatovic tiene contrato en vigor por tres años, pero se siente ninguneado y estaba dispuesto a llegar a un acuerdo económico para su salida. No le gustó la negociación de Calderón con Schuster a sus espaldas y el miércoles por la tarde tuvo un enfrentamiento con Portugal, un hombre de plena confianza de Calderón, fichado del Racing para convertirse en secretario técnico merengue. El presidente siempre dijo que Portugal trabajaría a las órdenes de Mijatovic, pero los primeros hechos le desmintieron. El martes, el ex entrenador del Racing se presentó en el club con un organigrama de trabajo muy diferente al del montenegrino y que prescindía de Míchel como máximo responsable de la cantera.