Parecía que no había descendido

¡Quién iba a decir que este partido era de Segunda División B! Mirando al graderío, sorprendía ver el gentío que se dio cita en el estadio. Alguno pensó que la Deportiva seguía en la categoría de plata. La ilusión persiste y este comienzo da alas para que la hinchada siga respondiendo como ayer. Primer día, 5.500 fieles. Y ahora a Burgos. La Federación de Peñas ya tiene a gente apuntada. 35 euros para socios y 30 para los que no lo son, incluyendo la entrada al Plantío. Muchas curiosidades dejó el primer choque. Se pudo ver que la charanga ha descendido con el equipo, así que Mazolas y los suyos siguen amenizando los minutos previos a los partidos. Las pancartas eran para los presentes y los ausentes. La más grande, la del Frente Norte: «En lo bueno y en lo malo siempre estaré a tu lado». Skándalo eligió un mensaje más corto: «Ni un paso atrás». Otras aludían a que Fran era el mejor y Asier Salcedo y Chupri... Incluso no faltó aquella misiva que en la última comparecencia del equipo en casa en Segunda División mostraron los futbolistas en una pancarta: «La Deportiva nos enciende el corazón». Y por supuesto, por megafonía sonó el «A Ponferrada me voy». Con el 3-0 botó El Toralín, pero con el 2-0 se volvió a cantar lo de «volveremos» y se escucharon los «olés» taurinos cuando los blanquiazules traían al toro riojano detrás del balón sin «olerlo». No faltaron los recuerdos para el vecino leonés y para Guille, que estaba en la grada, por lo que se coreó su nombre. Quien estaba en este caso en el palco era Alberto Villegas. El presidente del CF Palencia vio el choque del que puede ser su rival copero. Y a buen seguro que Alfonso del Barrio, entrenador morado, también se mezclaba en la grada con los aficionados. Estrenó capitanía En ausencia de Bornes, Fran, Rubio y Fuentes en el equipo inicial, Rubén Vega llevaba por primera vez el brazalete de capitán. El autor del 1-0 se olvidó de dárselo a alguien cuando fue sustituido. Cuando se dio cuenta, se lo entregó al que estaba más cerca, que era Irurzun. el navarro estuvo un rato con él en la mano hasta que encontró a quién dárselo, que no era otro que Bornes. Por cierto, Ivi Vales, Andoni, Marco y Fuentes vieron el choque en el palco detrás del banquillo rival.