La Cultural tira de oficio y ya apunta a la cabeza (3-0)

La visita de la Real Sociedad B se convirtió en una reválida para la Cultural (3-0). Los comienzos del encuentro del conjunto leonés fueron esperanzadores. El técnico gallego trató de hacerse con el control en el centro del campo al incluir futbolistas de toque. Iván Mateo y Manolo Pérez, con Aller en la recuperación, trataron de deshacerse de la presión del filial donostiarra. El entrenador guipuzcoano llegó a León con la lección muy bien aprendida. Los informes del entrenador vasco le llevaron a la presión como arma para destrozar el juego culturalista en el medio del campo, atosigando al cuadro leonés. Sin embargo, en esta oportunidad, los de Milo Abelleira supieron cómo contrarrestar la estrategia planteada por el técnico realista José Ramón Eizmendi, a través de juego trenzado en todo momento desde la medular a la vanguardia culturalista. La pareja formada por Manolo Pérez e Iván Mateo controló cada uno de los balones que el cuadro leonés movió de medio campo hacia adelante. Pese a que el bloque local llevó todo el peso del juego durante los primeros veinte minutos del compromiso deportivo, las ocasiones de gol no llegaron. Los donostiarras se rehicieron y pasaron a dominar el partido. Abelleira varió muy pronto a sus peones de ubicación, con la única finalidad de buscar más ataque. A la media hora situó a Pablo Suárez en el lateral derecho, a Cristóbal en el interior diestro, mientras que en la banda izquierda colocó a Israel y a Chema. El entrenador gallego quiso dotar a su equipo de más presencia en ataque, pero sólo sacó en limpio el disparo de Manolo Pérez, que se marchó muy por encima del marco defendido por Zubikarai. Con el marcador invariable, todo quedó para la segunda mitad del encuentro. Los primeros compases de los segundos cuarenta y cinco minutos se caracterizaron de nuevo por el manejo y el control culturalista en la parcela ancha. Fruto del dominio en la zona en la que se fabrica el juego llegó una internada de Cristóbal, que remachó Chema al aprovechar su habilidad y pillería en el área guipuzcoana. Con el marcador a favor, la Cultural esta vez no se echó atrás. Siguió intentándolo con balones hacia el flanco derecho, el de Chema, que penetró hasta el área y puso el balón para que Iván Mateo lo llevara a la red de Zubikarai con un toque de mago. Con el partido sentenciado, el cuadro culturalista siguió con idéntica dinámica sobre la portería realista. La enésima llegada la convirtió en gol Nasser. Tres a cero, que pudieron ser más. Satisfacción en el campo y la grada. Esto comienza a oler bien.