Diario de León

Los ríos, bajo mínimos en vísperas del comienzo de las frezas

Publicado por
P. Vizcay - león
León

Creado:

Actualizado:

Cuando faltan pocas semanas para que comience el ciclo reproductivo de las truchas los ríos leoneses, tanto los regulados como los no regulados, discurren con caudales mínimos para estas fechas. El estiaje, debido a la falta de precipitaciones y a la ausencia de nieve, se está prolongando hasta el punto de que en muchos cauces de montaña apenas discurre un reguero de agua. La situación no es mejor en los ríos regulados. Después de un verano de fuertes desembalses los pantanos mantenían todavía cotas sensiblemente superiores al pasado año. El hecho de que en el pasado otoño lloviese de forma abundante y de que en este apenas haya llovido ha determinado que el nivel de los embalses sea prácticamente el mismo que el pasado año con una clara tendencia a quedar por debajo en los próximos días. La pasada semana Riaño mantenía 256 Hm3 de una capacidad de 664, y ello a pesar de haber reducido de forma mas que considerable la suelta de agua. El Porma conservaba 138 de 318 con una pérdida semanal 1 Hm3 a pesar de que discurre casi seco. Pero el que peor lo tiene es sin duda, Barrios de Luna que de 308 le restan 81, perdiendo 2 Hm3 semanales para mantener el caudal ecológico. La situación no es preocupante todavía, si se tiene en cuenta de que estos valores están en el promedio de los últimos años, pero de cara a las frezas no resulta positiva. La reproducción de las truchas o freza se realiza desde mediados del mes de noviembre hasta enero o febrero según la naturaleza de los ríos y el punto de su curso. En los ríos bercianos suele adelantarse y también en los cursos bajos de los ríos de ribera. En las zonas de montaña las frezas se retrasan hasta diciembre (Por la Concepción la trucha en el fregón) reza un dicho montañés. En todo caso siempre resultan beneficiosas las avenidas del otoño que limpian los cauces, mueven las gravas y permiten a los reproductores colocarse en los frezaderos con suficiente antelación. Esta situación no se está produciendo este otoño lo que, de no cambiar, pondrá en serios apuros a nuestras «pintonas» cuando les llegue el momento. La gran contaminación que sufren muchos ríos es otro problema añadido. Los fondos se colmatan con lodos y sustancias abrasivas que sueldan los cantos rodados. Los reproductores se ven forzados a escarbar en estos fondos para depositar la carga de huevas y, cuando lo logran, la piel se queda sin protección quedando expuesta al hongo de la saprolegnia que se presenta en grandes manchas y, si afecta a un alto porcentaje de la piel, llega a ser mortal. También la puesta puede contagiarse del hongo con la consiguiente pérdida huevas que nunca llegan a eclosionar. Desde hace años algunas sociedades de pescadores trabajan en la limpieza de frezaderos, rastrillando las gravas para mover los fondos y facilitar así el trabajo de las hembras reproductoras. En este año tendrán que multiplicar el esfuerzo.

tracking