El francotirador blanquiazul «Este tipo de goles no son entrenables» Desde 54 metros la portería se parece a una caja de cerillas

Domingo 4 de noviembre de 2007. Estadio de Las Gaunas (Logroño). 17 horas y 36 minutos. La Deportiva está empatando sin goles con el Club Deportivo Logroñés y ya se ha rebasado la media hora de partido. El juego es poco fluido y las ocasiones brillan por su ausencia. No se atisba peligro inminente. Es una impresión errónea. Algo poco frecuente está a punto de suceder. De repente, el balón llega a las imediaciones del centrocampista de la Ponferradina Marco Antonio García Ruiz. Está situado dentro del círculo central del terreno de juego, escorado a la izquierda y todavía en su propio medio campo. Le separan un par de metros de la línea que divide la cancha en dos partes iguales. La distancia existente hasta la portería enemiga oscila en torno a los 54 metros. A sólo cinco de la línea de gol deambula con tranquilidad Emil Ioan Stef, un guardameta rumano que sigue el juego desde la distancia. Está tranquilo porque intuye que nada puede perturbar su entorno en esos momentos. Impresión equivocada. De pronto, Marco Antonio decide golpear el cuero directamente a puerta. Salvo él mismo, nadie lo espera y ahí radica la grandeza del lance. El factor sorpresa suele ser letal en las batallas. Esta vez no fue una excepción. Stef se teme lo peor y retrocede. Ya es inútil. Para Marco no es novedoso hacer un gol de este tipo. -¿Premeditado? -Está claro, desde el principio vi que el portero jugaba un poco adelantado, pero para hacer un gol así tienen que darse varias circunstancias, es un pase que intercepto yo, el balón me queda botando y no hay contrarios cerca. -Pero si casi no se ve la portería desde allí... -Es que yo no miro la portería, sólo me centro en el balón y le pego fuerte porque intuyo que el portero está adelantado. -Desde 54 metros ¿es récord personal? -Más o menos, en el Pizjuan metí uno con el Sevilla B desde un lugar muy parecido al del domingo y creo que el campo del Sevilla y este de Logroño deben tener medidas similares. -¿Cuántos goles ha marcado así en su carrera? -No lo llevo de cuenta exactamente, pero calculo que habré marcado unos diez más o menos. -Cuando Amaral ordena ensayar estrategia ¿usted coge el balón y se va al círculo central? -No, no (se ríe), a veces lo intento en los entrenamientos pero no es habitual porque eso no es entrenable, sale por instinto y por las circunstancias. -¿Cree que los porteros se quedarán bajo los palos cuando le vean a usted con el balón? -No sé, supongo que avisados van a estar pero tampoco creo que vayan a estar pendientes de eso, ojalá lo hagan porque así tendré más fácil realizar pases interiores. -¿Es más fácil que De Paula anote desde el centro del campo o que lo haga usted de cabeza entrando por encima de los centrales en el corazón del área enemiga? -Sin duda es mucho más fácil que marque Óscar desde el centro del campo. -Dicen los sabios que si usted tuviera más resistencia física podría jugar sobrado en Primera División... -Hombre, eso es muy difícil saberlo, lo único cierto es que para poder desarrollar mi mejor juego necesito estar bien físicamente y poco a poco lo estoy logrando después de los problemas que tuve al principio.