El Begar construye desde la defensa su mejor ataque frente a los rivales
Los leoneses acumulan en ocho jornadas 254 rebotes, dos terceras partes son bajo su aro Hughes y Bulfoni, los artilleros de un club que acumula 552 puntos a favor
Un buen ataque nace de una gran defensa. Así lo considera el técnico del Grupo Begar Gustavo Aranzana a través de un sistema de juego que intenta aplicar en una plantilla que poco a poco va cogiendo el tono a sus directrices. Entre los ejemplos, el tercer cuarto ante el Polaris Murcia en el que los leoneses sólo se dejaron anotar nueve puntos mientras que su aportación en el ataque llegaba a los 24. Y eso ante un adversario con jugadores contrastados y también notables especialistas en el tiro. Ni Kammerichs ni Triguero y mucho menos Risacher se encontraron a gusto con una defensa que no sólo se aplicaba en la zona con hombres como Hughes, Barnes y Thompson sino que también tenía su traslación al perímetro. Bulfoni, Marco, Yáñez, Evans y en especial Bernabé, se aplicaron en su cometido de una forma brillante posibilitando además un buen zurrón de robos de balón y lo que es más importante, situaciones de contraataque acabadas en su mayor parte en canastas. Con el AXA Barcelona también se repetía el guión, aunque en este caso cuatro minutos de desequilibrio impidieron el éxito. Y es que presumir de dejar a los de Ivanovic con sólo 67 puntos en su feudo del Palau sólo lo pueden hacer unos pocos. Ni Lakovic ni Basile o Kasun pudieron realizar su juego y sólo la inspiración de Grimau y cierto descontrol al final decantaron la balanza del lado blaugrana. DKV y Bilbao también sufrieron la intensidad de un juego en el que Aranzana quiere incidir. «Somos conscientes que aún debemos mejorar en el ataque pero con una gran defensa podemos subsanar en parte esta carencia. La defensa es fundamental y dejar a los rivales cerca de los 60 puntos supone que nuestras opciones de triunfo serán elevadas». Con estas palabras el entrenador del Grupo Begar pone sobre la mesa una parte destacada del planteamiento del equipo. «Tenemos que intentar que la defensa siga siendo nuestro mejor referente para optar a las victorias» apuntó al acabar el partido ante el Polaris. Y los números por ahora van dándole la razón en un equipo que no puede luchar hoy por hoy con los grandes trasatlánticos baloncestísticos españoles en fichaje de estrellas, pero sí en una labor de equipo en la que todos los jugadores se implican por igual tanto a la hora de parar al adversario como en la de construir el ataque. Y en ese trabajo los pívots se han convertido en un seguro de vida, empezando por los a priori titulares como Rick Hughes y Kevin Thompson y continuando por un Lamont Barnes que, a pesar de salir desde el banquillo, acumula ya 39 capturas (31 de ellas en defensa). El Begar, en ocho encuentros disputados suma precisamente 254 rebotes siendo dos terceras partes de ellos en la zona propia lo que le convierte en la undécima mejor defensa de la liga. No obstante, la intensidad en el juego y a la hora de frenar al rival también tiene un precio para los de Gustavo Aranzana, las 160 faltas personales señaladas que le convierten en el segundo equipo de la ACB más castigado en este apartado sólo superado por el Alta Gestión Fuenlabrada. La media de los leoneses en este capítulo llega a las 20 faltas por partido (160 en total), eso sí, muy similar a la de otros equipos como el Akasvayu Girona (161), Gran Canaria Grupo Dunas (162), el próximo rival en la liga, el Tau (164), el Unicaja Málaga y el Real Madrid (165). También aparece el AXA Barcelona (167).