El líder gana con sufrimiento (0-1)

Un solitario gol de Óscar de Paula, máximo realizador del grupo II de la Segunda División B, dio los tres puntos a la Ponferradina en su visita a Zubieta para enfrentarse el conjunto filial de la Real Sociedad. Los jugadores de David Amaral volvieron a demostrar su consistencia a pesar de no realizar un partido excelente en el plano ofensivo, ya que supieron sacar el máximo rendimiento del tanto y evitaron que las acometidas realistas de la segunda parte pusieran en peligro la victoria gracias a una impecable solidez en defensa. El único acercamiento fue obra del atacante local Viguera, que estuvo cerca de conectar un servicio del incisivo Gabilondo pero el meta Cabrero se anticipó y retuvo la pelota. El primer disparo a puerta llegó en la siguiente jugada, fue obra del berciano Irurzun desde treinta metros y se marchó junto al poste derecho de Zubikarei. La réplica realista llegó sólo un minuto más tarde cuando un disparo lejano de Rodellar estuvo cerca de sorprender a Cabrero. La posesión de pelota se repartía entre los contendientes aunque el juego sufría parones que no permitían disfrutar de un fútbol fluido. La situación cambió en el último minuto de la primera parte, cuando apareció el máximo goleador del grupo y ex-jugador del primer equipo donostiarra. En la mejor acción del primer tiempo, el centro del campo de la Ponferradina movió el balón hasta dar con la posición de Ernesto en la banda derecha. Éste se internó con velocidad hasta la línea de fondo y soltó un preciso centro en busca de la referencia ofensiva, De Paula, que ganó la posición a su marcador y cabeceó al fondo de las mallas sin que Zubikarei pudiera responder. La Ponferradina volvió a dar muestras de las características que debe poseer un conjunto que aspira a los máximos objetivos: seguridad defensiva y eficacia rematadora. Fue un duro golpe para los jóvenes jugadores del filial blanquiazul justo antes del descanso, lo que hacía prever un giro en las circunstancias que presidirían la segunda mitad. La Real cambió el planteamiento y salió dispuesta a conseguir el empate con una propuesta más vertical y con Viguera que se entretuvo y permitió a Cabrero arrebatarle la pelota con los pies. La Ponferradina retrasó su línea defensiva y dispuso su maquinaria de contragolpear, lo que permitió a la Real ganar terreno y disponer de mayor número de oportunidades, aunque con la sombra de la sentencia en cualquier jugada de la Ponferradina, que tenía más espacio para salir con rapidez. En el minuto 69, Cabrero volvió a emplearse a fondo en un disparo de Balenciaga que llevaba trayectoria de gol. Cinco minutos después, la pelota quedó muerta en el interior del área berciana pero ningún jugador local supo empujarla a la red y la ocasión más clara iba a llegar a doce del final. En pleno acoso donostiarra, la pelota cayó rebotada a los pies de Viguera y su disparo fue despejado por Cabrero en una acción espectacular. De ahí al final, la Real mantuvo el acoso pero la seguridad defensiva berciana cerró las puertas del empate. Santamaría y Nacho fueron los hombres más destacados en defensa y demostraron la serenidad del líder.