De San Justo al Jarama

Nada mejor que mejorar la conducción de la mano de todo un campeón. Esa fue la sensación que experimentaron una docena de personas hace unas fechas en el circuito madrileño del Jarama al que acudieron invitados por Telenauto. El siete veces campeón de España, Miguel Ángel de Castro, fue el encargado de ejercer de maestro de ceremonias y profesor avezado. Pruebas de seguridad en la que los protagonistas pudieron apreciar como los sistemas ESP resultan imprescindibles para dominar un vehículo en un cambio brusco de dirección, y otras en las que se comprobó la viabilidad de la frenada asimétrica que consistía en frenar bruscamente con un coche sin el ABS y con el puesto en una superficie mojada y con diferente grado de agarre en cada uno de los lados del vehículo (en un lado del coche se frenaba en una superficie deslizante similar a las pinturas que existen en las carreteras y en el otro lado asfalto normal), conformaron una jornada intensa y repleta de sensaciones para los participantes. En situaciones extremas Pero aún hubo más ya que el propio De Castro convirtió en protagonistas a los doce invitados por parte de Telenauto en este Race Tour de una prueba de seguridad denominada Mickey Mouse y que consistía en que en un circuito lleno de conos conduciendo con un vehículo ágil, en este caso un Polo GTI, quedaron determinadas las habilidades de cada uno para sortear los obstáculos en primera velocidad y a fondo. Una prueba en suma muy divertida que a todos los participantes les encantó ayudando a la vez a corregir pequeñas deficiencias de colocación de las manos muy importantes a la hora de mover el volante. Seguidamente el reto fue subir a un 4x4 (Touareg) a través del que se comprobaron las sensaciones de conducir sobre barro sorteando además un badeo de 50 centímetros de profundidad, baches así como transitar con este tipo de vehículos por una carretera normal. De los riesgos de una carretera o trazado sinuoso se pasó con coches de gran cilindrada en los que la velocidad se conjuga perfectamente con la seguridad (VW Golf) comprobando in situ las exigencias del circuito madrileño. Allí el siete veces campeón de España de turismos se encargó de indicar cómo trazar de la mejor manera posible cada una de las curvas, cómo coger el volante, qué fallos iban apareciendo y las altas prestaciones de los vehículos con una seguridad incuestionable. Todo para completar una jornada en la que los participantes lograron no sólo comprobar cómo se transita en un circuito sino mejorar de manera ostensible sus dotes de pilotaje y seguridad.