Diario de León

LAS SEMIFINALES

Un duelo vasco con sabor a revancha y un clásico se citan

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Un duelo vasco con sabor a revancha tanto para el Tau Cerámica como para el Iurbentia Bilbao Basket, por los últimos resultados entre ambos equipos, dará hoy al ganador una plaza en la final de la Copa del Rey se está disputando en el Fernando Buesa Arena de Vitoria. Tras superar en dos emocionantes cuartos de final a Unicaja y AXA Barcelona, ambos equipos se presentan en la primera de la semifinales del torneo más intenso del baloncesto ACB dispuestos a alcanzar el partido decisivo y también a resarcirse de derrotas anteriores en este mismo enfrentamiento que les han dejado huella. El Iurbentia, la de la final de la Supercopa ACB de esta misma temporada, jugada ante su afición en el marco del esplendoroso Bizakia Arena y en la que el TAU, después de haber superado también al Barça en semifinales, le dejó sin lo que podía haber sido su primer título entre la elite. El conjunto vitoriano, de la primera derrota ante el vecino bilbaíno en su cancha del Fernando Buesa Arena, donde hasta hoy estos partidos siempre tenían color local, esta misma temporada en competición liguera. Esos precedentes, que le dan al choque un interés añadido, y la forma por la que discurrieron los dos primeros partidos de cuartos de final, hace barruntar un duelo bastante más incierto de lo esperado a priori entre dos equipos que, a pesar de todo, aún están en estadios diferentes por dimensión deportiva y económica. El DKV Joventut está preparado para conquistar la Copa en Vitoria. El equipo de Aíto García Reneses repetirá semifinales del torneo, y en esta ocasión se ha ganado la condición de muy serio aspirante al título, tras someter a un Pamesa Valencia que fue dominado de principio a fin en un duelo que terminó convirtiéndose en una exhibición del equipo verdinegro. Rudy Fernández, pletórico de forma y en racha anotadora en la que se presume será su última Copa antes de dar el salto a la NBA, lideró a un Joventut que ejerció un dominio casi insultante y en el que también brilló Ricky Rubio. El joven base del Joventut, que dio otro paso más hacia los Juegos de Pekín, maravilló a los ojeadores de la Liga norteamericana presentes en el Buesa Arena, que se rindió ante el descaro, inteligencia y capacidad de sacrificio. El Real Madrid, su rival hoy, ostenta un extraordinario potencial. Todo puede suceder.

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