Los jugadores de la Cultural, bajo sospecha Abelleira vuelve a las andadas

No toda la culpa de los pobres resultados deportivos de la Cultural en la temporada se debe al entrenador Milo Abelleira. El técnico es responsable como máximo exponente deportivo del club de que los resultados no sean los que se planificaron a principio de la temporada, cuando diseñó el bloque, pero de lo que no cabe ninguna duda es que los futbolistas tienen tanta responsabilidad como el que más para comportarse como profesionales, tanto dentro como fuera del campo. Cuando en un equipo de fútbol, los resultados no acompañan, la cabeza de turco siempre es la del entrenador, porque es más fácil echar a la calle a uno que a 22, pero la responsabilidad es la misma de uno que de otros. Después de la brillante victoria cosechada ante el Zamora en el último partido disputado en casa, todo apuntaba a que la Cultural iría hacia arriba en la tabla clasificatoria, pero la goleada sobre el equipo que dirige el entrenador leonés Álvarez Tomé hizo el efecto contrario. Sirvió para que los futbolistas se relajaran, como si ya hubie ran conseguido algo grande. Los partidos ante el Guadalajara y la Real Sociedad B pusieron en su sitio a un equipo falto de actitud en cada uno de los dos encuentros. Los partidos dentro del grupo segundo de la Segunda División B no se ganan habitualmente por desplegar sobre el campo mayor calidad que el contrario, sino por la conducta en forma de lucha, garra, sufrimiento y dejarse la piel en el césped, características éstas por las que no destaca precisamente la Cultural. Con la calidad que atesora la inmensa mayoría de la plantilla, si se mezclara con unas pizcas de gallardía, lucha y espíritu de sacrificio, el equipo leonés seguro que no estaría en novena posición de la tabla clasificatoria. Además, las señas de identidad de una ciudad como León siempre han sido la garra y el sacrificio. Los demás clubes leoneses de otras modalidades deportivas las suelen emplear siempre. Son un seguro de vida cuando con calidad sólo no basta. La Cultural se diluyó en Guadalajara y en San Sebastián por no emplearse con coraje, ímpetu e ir al balón con la sangre que se precisa para sacar los partidos adelante. La Real Sociedad B, repleta de juveniles en sus filas, sacaron los colores a los culturalistas por emplearse al máximo de sus posibilidades físicas. Futbolistas que entienden que la fuerza y la lucha son la base sobre la que se consolida un equipo y que en muchas oportunidades bastan para ganar los partidos dentro de este grupo segundo. Si jugadores bregados en mil batallas, como los de la Cultural, no perciben después de veintiséis jornadas disputadas que la batalla es la principal arma para derrotar al rival, es que no han entendido la filosofía del grupo segundo. Ahora, están bajo sospecha. E l partidillo disputado en el estadio Antonio Amilivia para preparar el partido del domingo ante el Real Unión (17,00 horas) puso de manifiesto que el entrenador Milo Abelleira va a seguir el mismo sistema que utilizó frente al Zamora y que tán buenos resultados dio al equipo leonés. La baja por sanción de Iván Otero, que acumuló cinco cartulinas amarillas ante la Real Sociedad B, será cubierta por Fernando Martín, mientras que tanto Israel como David Pérez actuarán en las bandas por delante de los laterales. Jugarán los dos zurdos por la gastroenteritis que sufre Cristóbal, que le impedirá llegar al partido ante los irundarras. Chema se situará por detrás de Oriol Riera en las posiciones más avanzadas del equipo. Salvo sorpresas de última hora la alineación titular será la formada por Bermúdez; Olmo, Álex Goikoetxea, Fernando Martín, Gorka García; Aller, Iván Mateo, David Pérez, Israel; Chema y Oriol Riera (entra en la titularidad por Addison). El Real Unión llega mañana a León. Los componentes del equipo irundarra han pedido campo a la Cultural para entrenar el día antes del partido por la tarde. Entrenarán a partir de las 18.00 horas de mañana en las instalaciones del Área Deportiva de Puente Castro.