«Hay que pelear por jugar el ascenso hasta que las matemáticas digan lo contrario»

El entrenador gallego de la Cultural, Milo Abelleira, con gesto serio como de costumbre, valoraba en rueda de prensa: «En este campo nadie ha ganado con facilidad y ha habido equipos como el Huesca y el Bilbao Athletic que remontaron en los últimos minutos. Está claro que es un campo muy complicado y difícil para todos los rivales que lo visitan. Salimos al principio a por el partido, tuvimos tres ocasiones seguidas que no fuimos capaces de meter. Sin embargo, después la Peña Sport dispuso de ocasiones para adelantarse, ya que es un conjunto con mucha velocidad por bandas. Tuvimos problemas para tapar el flanco izquierdo». Abelleira reconoció que sufrieron para frenar a los navarros y que arriesgaron tras el descanso: «Con el empate a uno nos volcamos y sabíamos que podíamos ganar el partido. Al final nos llegó la recompensa con el gol de Riera que, tal vez, tuvo que llegar antes». En cuanto a las posibilidades de su equipo de colarse entre los cuatro primeros, Abelleira indicaba: «La victoria no vale para lo que queríamos que era acabar en fase de ascenso, pero tenemos que seguir peleando hasta que las matemáticas digan lo contrario. Además, los de atrás vienen fuertes, son equipos importantes que pelearon la temporada pasada por los puestos de arriba. Tenemos que tener cuidado con esos conjuntos que se pueden acercar y complicarnos la vida». Patxi Rípodas, incrédulo No se lo podía creer. Patxi Rípodas había visto como su equipo se adelantaba en el marcador y acababa perdiendo el partido en una jugada postrera: «Nos han metido el segundo gol con una gran jugada de tres toques y nosotros sin poder colocarnos. Son cosas inconcebibles y contra esto no podemos hacer nada», declaraba el míster navarro. «Eso demuestra el nivel de cada equipo y este con dos ocasiones que han tenido, se han llevado el partido. Además, después de conseguir nosotros el gol, nos han hecho el empate al poco tiempo. No nos ha dado tiempo ni a respirar. Si hubiésemos aguantado diez minutos más el marcador, el partido lo hubiésemos tenido encarrilado. La pena ha sido que hemos tenido ocasiones para sentenciar, pero para meter un gol nos hacen falta seis oportunidades. Esa es la diferencia entre un equipo grande y nosotros».