Aragonés se irá al extranjero El seleccionador promete hacer el Camino de Santiago si gana la Eurocopa

«No tengo que correr, mi cerebro está perfecto y acumulo una experiencia terrible. Sólo es viejo quien quiere ser mayor y yo voy a seguir entrenando después de dejar la selección tras la Eurocopa». Así de tajante se mostró Luis Aragonés, que en julio cumplirá 70 años, cuando en el programa «Tengo una pregunta para usted» le cuestionaron este martes acerca de si no se sentía demasiado mayor para ocupar el cargo de seleccionador. Y vaticinó que seguramente saldrá a entrenar fuera de España. El Sabio de Hortaleza no avanzó nada sobre la lista de 23 elegidos para el próximo campeonato de Austria y Suiza y reiteró que tiene la «conciencia tranquila» por no convocar a Raúl. Comenzó su comparecencia con una pequeña introducción en la que desgranó los motivos, defender a los futbolistas y lavar su propia imagen, que le llevaron a aceptar la invitación a la octava edición del programa de TVE por el que antes pasaron ilustres personajes como el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y el jefe de la oposición, Mariano Rajoy. «No soy ni mucho menos mediático, sólo un seleccionador que quiere defender al fútbol y a sus profesionales, a los que no se respeta, se duda de su profesionalidad y hasta se insulta», enfatizó Luis, que no descartó dirigir algún día un equipo de chicas. En el plano personal, lamentó que su imagen se haya «deteriorado de una forma descomunal» por gente que, según dijo, ni le conoce, ni sabe cómo es, ni cómo piensa. Cercano y campechano A fin de «no parecer tan ogro», se mostró cercano y campechano en el interrogatorio al que fue sometido por 40 hombres y 20 mujeres, una muestra representativa de los ciudadanos españoles y de los diversos equipos de fútbol buscada por TNS-Demoscopia. «¡Menos mal que hay paridad!», exclamó cuando, a la sexta, apareció la primera pregunta de una mujer. Se refirió al tópico de la escalera que se sube o se baja al bromear con un gallego y se comprometió a hacer el camino de Santiago junto a su mujer si España gana la Eurocopa. Como curiosidad, se decantó por el mote de «zapatones» (por su feo correr) sobre el del Sabio de Hortaleza por aquello del «sólo sé que no sé nada». Después, deseó suerte a un aficionado brasileño de color que le preguntó por qué España casi nunca gana nada. «Brasil sí porque es un país exportador que tiene jugadores hasta en la Conchinchina», ironizó. A su manera, explicó que llamar a Henry «negro de mierda» para motivar a Reyes «era un halago al francés». Se detuvo bastante a la hora de querer demostrar que no es racista. Accionista del Espanyol Luis negó su supuesto antimadridismo y, muy al contrario, dijo estar «agradecido» al club blanco. Recordó que el Madrid le fichó en 1958 y que sucesivamente le cedió al Recreativo, el Hércules, el Plus Ultra y el Oviedo. Al ver que «era imposible» jugar con Kopa, Rial, Di Stéfano, Puskas y Gento, pidió a Bernabéu que le traspasaran y le fichó el Betis. Más tarde llegaría el Atlético. Reveló que no es socio de ningún equipo y sólo accionista del Espanyol, y rechazó de plano la idea de que los futbolistas están sobrevalorados en sus sueldos. «Es una cuestión de la oferta y la demanda y a veces incluso están mal pagados. El fútbol genera mucho dinero y lo normal es que se lo lleven los jugadores. Lo que hay que hacer es dar gracias a Dios por pertenecer a una profesión donde se paga una barbaridad», adujo. Recordó que en Segunda, Segunda B y Tercera también hay mileuristas, un término que le sonó muy extraño, como si lo desconociera, cuando una aficionada lo empleó para comparar lo que cobra un españolito de a pie con las estratosféricas fichas de algunos profesionales del balón. Se metió en un jardín al comentar que había hablado con un futbolista del Athletic y, al preguntarle de quién se trataba, no recordar su nombre. A la hora de responder sobre el afán internacional de las selecciones autonómicas, evitó debates de fondo pero dejó claro que Euskadi no es una nación. Las garrapatas, el sexo durante la concentración de la Eurocopa, las espirometrías, para explicar la condición física de base de los españoles y el compromiso de hacer el Camino de Santiago con su mujer, si triunfa en Austria-Suiza, formaron parte del anecdotario que dejó la presencia de Luis Aragonés en el programa de TVE «Tengo una pregunta para usted». Luis Aragonés acudió a televisión, expuesto a «tumba abierta» al interrogatorio de unos aficionados seleccionados por una empresa de sondeos, con la intención de cambiar su imagen en vísperas de la Eurocopa y, con altibajos, salió bien parado. No todo fue Raúl. La ausencia del capitán madridista abrió el programa y estuvo presente durante buena parte del mismo, pero no fue lo único. Hubo más anécdotas. El entrenador dijo que ama tanto su profesión que cuando pasa cerca del Bernabéu, «el olor a hierba» le «encandila», y se empeñó en demostrarle a un aficionado que le había gustado el juego de la selección en la primera fase del Mundial, pese a que éste insistía en que no, y utilizó la ironía para responder a quien le preguntó por sus salidas de tono («¿Salidas de toros?»). Fue una vez más genio y figura.