Miércoles negro

DERROTA, totalmente decisiva, de Baloncesto León; eliminación, de la Copa del Rey de Ademar. Dos dolorosas derrotas con consecuencias realmente negativas. Un miércoles deportivamente negro. No tuvo opciones Begar León ante un poderoso Pamesa. Apenas leves intentos de querer y no poder. Siempre los levantinos llevaron la batuta del partido y lo decidieron a su favor con amplitud. Ya las posibilidades matemáticas, se han convertido en cálculo infinitesimal para hallar el más leve resquicio por donde encontrar una solución satisfactoria. A cuatro victorias de la salvación cuando sólo restan cuatro partidos. Por añadidura, hay enfrentamientos entre equipos que podrían tender la cuerda de salvación del naufragio. Temporada de tránsito por la ACB y vuelta a la gris competición de la LEB. De nuevo a iniciar una travesía por el desierto. No es momento de análisis críticos, de hacer leña del árbol caído, de mirar hacia atrás y analizar lo que pudo haber sido y no fue. Sí, es momento, para la reflexión, para empezar a marcar el buen camino que permita que, la nueva temporada por la LEB, sea camino y no posada. Entrar en elucubraciones que llevan al cálculo infinitesimal no parece lógico; aunque se tenga en cuenta, con la moral más elevada, que muchas veces la lógica falla. Ademar, en Zaragoza, hizo el peor partido de la temporada. Particularmente en una segunda parte -la primera había concluido con ventaja mínima para Ademar- talmente para olvidar; una segunda parte en la que se evidenciaron el cansancio, el rédito dejado por las lesiones, la falta de respuesta para responder a un juego rápido, cual planteaba el Arrate. Se ha perdido la última oportunidad de conseguir un título, pero lo hecho ahí está como reflejo de un resultado favorable en el rendimiento de cuentas de la temporada, un balance que puede ser muy favorable, si se logra mantener el tercer puesto de la clasificación en la Liga, un tercer puesto que da derecho a participar, la temporada venidera, en la Copa de Europa. Tres partidos restan para el final. El calendario es propicio; tal vez el partido clave se encuentra en la visita del CAI la semana próxima. Final de Liga, que es final de temporada, emocionante. Queda un buen tiempo para reponerse del fallo copero y del cansancio acumulado. Nuevamente: ¡Ade mar a luchar!