Todos contentos

EL PALACIO de Deportes fue escenario del cierre de la temporada balonmanista. Ademar y Teka jugaron un partido interesante, vibrante en muchas ocasiones, particularmente en los minutos finales. Teka, uno de los históricos del Balonmano, con un palmarés brillantísimo, con épocas en las que -para que nos entiendan los más jóvenes aficionados- era como el actual Ciudad Real, se jugaba la permanencia en la categoría, en tanto Ademar decía adiós a una temporada extraordinaria, con el tercer puesto de la clasificación general asegurado y, con él, la presencia en la próxima edición de la Liga de Europa, amén de la participación en la Copa Asobal. Muchas despedidas de jugadores con participación destacada en los logros, con una entrega total durante ésta y anteriores temporadas a la causa ademarista: Garralda, Jakobsen, Laluska, Urdiales, Sigurdsson, Saric y Valcic. Mucha carga emotiva, tanta que se hizo notar sobre la cancha. De todas las formas, a pesar de tener el tercer puesto asegurado y no jugarse puntos importantes para Ademar, el equipo luchó durante todo el partido poniéndoles difícil la necesaria victoria buscada con ahinco por los cántabros, hasta los segundos finales. Trece segundos faltaban para el final y el marcador señalaba una igualada a 27 goles. El empate llevaba al Teka al abismo, no le servía. Un tiempo muerto pedido por el entrenador para una jugada final en la que estaba no sólo la temporada, sino el destino de un equipo, como hemos apuntado, de los más históricos del Balonmano nacional. Y los cántabros consiguieron, en el último segundo, el gol que les daba la victoria y la salvación. El entusiasmo de los seguidores visitantes se desbordó, saltando a la cancha para abrazar a sus jugadores y festejar con ellos tan importante victoria, con gritos jubilosos de Teka, Teka, Teka, voces que fueron secundadas pluralmente por los aficionados leoneses que se unieron, deportivamente a la celebración; como también, en justa correspondencia, los aficionados cántabros se unieron a la ovación y a las voces de Ademar, Ademar a los aficionados locales, quienes despedían a su equipo con el entusiasmo gestado por la gran temporada firmada por el equipo. Mi felicitación al Teka por la permanencia; mi más cordial felicitación a jugadores, entrenador y directivos de Ademar por la temporada extraordinaria firmada. Y el mejor de los deseos para Santi Urdiales -por cierto cántabro- de que tenga una rápida, total, feliz recuperación.