Lissavetzky obliga a los tenistas a verse con Muñoz para acabar con la crisis

Alarmado por la crisis abierta en el tenis, consecuencia del conflicto que mantienen el presidente de la Federación Española, Pedro Muñoz, y los jugadores del equipo de Copa Davis, el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky, ha decidido intervenir para intentar solucionar la crisis «lo antes posible». Lissavetzky convocó ayer a los tenistas y técnicos del equipo, que deberán reunirse esta semana con Pedro Muñoz, en busca de un «marco de convivencia» a cuatro meses de la semifinal de Copa Davis. El secretario de Estado volvió a encontrarse este lunes en la sede del CSD con Pedro Muñoz, y con el capitán del equipo español, Emilio Sánchez-Vicario, a quienes solicitó «prudencia» y «mesura», después del duro cruce de declaraciones entre el presidente y los tenistas, que acusan al presidente de «dictador» y de haberlos engañado, sin contar con su opinión para decidir la sede de la Davis. Los tenistas, encabezados por Nadal, ya aseguraron la pasada semana que no mantendrían ninguna reunión con Muñoz. La exigencia de Lissavetzky llega, además, a menos de una semana para el comienzo de Roland Garros, en el que Nadal defenderá su título tras conquistar por primera vez el Masters Series de Hamburgo ante Roger Federer. «Para todos los jugadores lo más importante es centrarse en jugar, que es lo que nos toca. Por lo demás, hay situaciones límite que uno no puede elegir, y opta por hacer lo que cree que es mejor, pero siempre en grupo», sentenció Nadal. Después de llamar al orden el pasado viernes a Pedro Muñoz, Lissavetzky valoró ayer «positivamente » la disposición del presidente de no agravar la crisis y verse «de forma inmediata» con los jugadores, tras la convulsión generada por los mensajes telefónicos enviados por el máximo dirigente a tenistas, entrenadores y agentes de jugadores. «El presidente ya ha expresado su voluntad de reunirse con ellos en cuanto sea posible, quizás este martes», anunciaron fuentes del CSD, que busca un acercamiento ante las partes «para afrontar los importantes compromisos de futuro en las mejores condiciones».