Cerrar

«Se acabó la crisis?

Pepu ya es historia enla Selección

La Federación cesa al técnico en sólo cinco minutos tras acusarle de deslealtad y tiene en cartera a Aito o Scariolo como sustitutos Cuatro razones para un cese

Publicado por
Amador Gómez - león
León

Creado:

Actualizado:

La guerra entre el presidente de la Federación Española de Baloncesto (FEB), José Luis Sáez, y José Vicente «Pepu» Hernández, desembocó ayer en la esperada destitución del seleccionador nacional. A dos meses de Pekín, la situación era insostenible entre el presidente y el técnico, cuyo despido estaba anunciado desde la pasada semana, cuando Pepu no asistió a una reunión convocada para planificar los Juegos que coincidía con una conferencia privada y el entrenador denunció posteriormente una «persecución» por parte de la federación. Sáez acusó ayer a Pepu de incumplimiento de compromisos contractuales, de dejación de funciones, de falta de respeto, y de aprovecharse de su cargo y de la imagen de la selección en beneficio propio. Menos de cinco minutos de reunión le bastaron al presidente para comunicar al técnico su destitución. «Me han despedido sin motivos ni razones, pero a partir de ahora se van a construir», sentenció Pepu a su salida de la sede federativa, antes de que Sáez cargase duramente contra él durante una conferencia de prensa en la que ofreció sus explicaciones. «He intentado hasta el final mantener al seleccionador. Hasta que me han puesto la bomba en casa, y no sólo una, sino varias veces», aseguró el presidente. El gran perjudicado de la profunda crisis que no han sabido gestionar el máximo dirigente federativo y el técnico madrileño es el baloncesto español, que un año y ocho meses después de alcanzar el mayor éxito de su historia, el oro mundial en Japón, y en vísperas de la lista olímpica, se encuentra sin seleccionador, cargo al que aspiran García Reneses y Scariolo. La FEB espera anunciar «lo antes posible» su sustituto, que ahora deberá trabajar contra reloj para los Juegos. El presidente estaba convencido de que Pepu, a quien considera sospechoso de tener un acuerdo con algún equipo (Unicaja o Barcelona), quería forzar su salida de la selección, mientras que el técnico, que admitió estar «profundamente triste», lamenta haber sido víctima de continuas «trampas».