Diario de León

Fútbol | Eurocopa 2008 Análisis | Las armas contra Italia

Sergio Ramos se disculpa y pide respeto La velocidad en la circulación y la solidaridad defensiva serán claves

Aragonés: «El futbolista más disciplinado en la selección tiene que ser el mediocentro»

Los jugadores de la selección española Pepe Reina, Fernando Torres, Santiago Cazorla y Sergio García

Los jugadores de la selección española Pepe Reina, Fernando Torres, Santiago Cazorla y Sergio García

Publicado por
Iván Orio Iván Orio - innsbruck Innsbruck
León

Creado:

Actualizado:

España tiene el domingo una oportunidad única para saldar cuentas consigo misma, hacer un quiebro a la Historia y eliminar en los cuartos de final de la Eurocopa a Italia, la actual campeona del mundo. Cuerpo técnico y futbolistas coinciden en que la clave para derrotar a la escuadra azzura es que la selección sea fiel a sí misma y despliegue en el estadio de Viena el juego de toque que le ha hecho reconocible. Pero, al margen de tópicos y declaraciones más o menos elocuentes, lo cierto es que el equipo nacional dispone de armas suficientes para hacer daño, y mucho, a la tropa de Donadoni. Lo fundamental será cargarlas a tiempo porque, de lo contrario, la contraofensiva italiana puede ser demoledora. La velocidad en la circulación de balón, la disciplina táctica, mantener la pegada y, sobre todo, tener una fe ciega en su superioridad son los ingredientes que necesita España para provocar una indigestión en la defensa azulona y convertirse en aspirante al título. Velocidad en el toque La calidad de España cuando tiene el balón es incuestionable, pero ante Italia no le va a valer el ritmo pausado que sacó a relucir durante bastantes minutos en la primera fase. La escuadra azzurra entregará la iniciativa a la selección y se replegará sin complejos, por lo que tendrán que ser los hombres de Luis Aragonés los que marquen el tempo del partido y propongan cosas. Y mover la pelota con lentitud es conceder excesiva ventaja a un equipo que se siente muy cómodo en encuentros tediosos y que saca dinamita de cualquier error en un arranque inesperado. El técnico de Hortaleza ensayó en los campos de entrenamiento de Neustift los toques rápidos de balón y el primer toque, dos variables del juego que preocupan a una Italia bastante limitada en el repliegue. «Son buenos defensivamente y por eso siempre tenemos que buscar profundidad y crear peligro de forma constante. Debemos mover el balón lo más rápido posible», confirmó Silva, que aún tiene algunas molestias de su esguince pero que estará recuperado para el choque de cuartos de final. Disciplina táctica Puede parecer una obviedad, pero si contra alguna selección hay que cumplir a rajatabla el sistema táctico es ante Italia. Acostumbrados a competir en situaciones límite, los campeones del mundo se aprovecharán de cualquier resquicio en el esquema español. Las líneas deben estar muy juntas y la conexión defensiva entre el centro del campo y los defensas debe tener siempre cobertura. Un apagón en esa comunicación, aunque sea mínimo, puede dar al traste con todo el trabajo. Dice Aragonés que el futbolista más disciplinado en la selección tiene que ser el mediocentro. Su papel será fundamental para ordenar a los compañeros. Debe asumir el mando y que los italianos lo perciban. La pegada es uno de los sellos de la roja. David Villa es de momento el pichichi de la competición con cuatro tantos, pero también mojaron Fernando Torres, ante Suecia, y Güiza, ante Grecia. Es positivo que los seis tantos de la selección hayan sido obra de los delanteros, pero también sería importante que algunos centrocampistas destacaran en esa faceta. Luis Aragonés se lo ha pedido y la demostración palpable de ello fueron los disparos de Xabi Alonso en el tercer encuentro. La selección española es masoquista históricamente. No se puede vender públicamente un escenario idílico o placentero. Entonces no sería España. Quizás vaya con el carácter de los entrenadores o de los jugadores, pero la realidad es que cuando juega la selección se habla de casi todo menos de fútbol. Lo confesó Camacho después de dejar el cargo. «Yo montaba un lío en la rueda de prensa y los periodistas se echaban las manos a la cabeza. Así nos dejaban trabajar tranquilos mientras ellos fabricaban historias de barro». Para Luis, un jugador que es la referencia para muchos compañeros no puede seguir este guión. No es el idóneo cuando se trata de un futbolista en formación. Sergio ha crecido muchísimo como futbolista y no puede frenar esa progresión porque los focos externos al mundo del fútbol le conduzcan por el camino equivocado. Sergio Ramos se disculpó ante Luis Aragonés y parece que todo está olvidado.

tracking