Diario de León

España será de oro

La Selección española lucirá frente a Rusia su segunda camiseta, la de color amarillo, por su condición de visitante en el partido de semifinales. Aragonés repetirá su equipo de gala

Cesc firma autógrafos tras el entrenamiento que la Selección realizó ayer por la tarde en Neustift

Cesc firma autógrafos tras el entrenamiento que la Selección realizó ayer por la tarde en Neustift

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Julián Ávila - viena
León

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añana, en el Ernst Happel de Viena, España se vestirá por primera vez de oro en una competición oficial, para evitar la coincidencia con el color rojo de la elástica de la selección rusa. Sin embargo, se mantendrá el pantalón azul marino, ya que los rusos utilizarán el blanco. La Selección española lucirá frente a Rusia su segunda camiseta, la de color amarillo, por su condición de visitante en el partido de semifinales. El conjunto de Luis Aragonés todavía no ha estrenado esa indumentaria en la Eurocopa. Ayer, superconcentración. Los jugadores están tan metidos en su papel que nadie quiere perderse el encuentro de semifinales. Las sesiones de recuperación en agua fría han sido muy positivas y Luis Aragonés se ha decantado por repetir el once de gala. Una buena señal para todos. El hecho de que tenga el equipo decidido aleja el fantasma de las dudas, un mal compañero de viaje cuando se afronta un encuentro a cara o cruz. Otro buen mensaje es que los suplentes están empujando muchísimo la puerta de la titularidad y que el seleccionador dispone de un abanico amplio de alternativas en función de cómo se vaya desarrollando el partido. Por ejemplo, Xabi Alonso se marcó un partidazo frente a Grecia y es un recambio muy fiable de Marcos Senna, que acabó el cuarto de final algo fastidiado. Otro, Cesc. Materializó el penalti decisivo y ha entrado de lleno en la correa de distribución del equipo. No es titular simplemente porque algunos compañeros sólo están para cuarenta y cinco minutos y es más interesante contar con su concurso para el final del partido, donde posiblemente se decida el billete para la finalísima. Luis conoce bien a Rusia y espera un partido muy distinto. Completamente diferente al del estreno del torneo. El equipo de Guus Hiddink ha ido de menos a más y ahora conoce mejor a la selección española. La buena noticia para España es que Rusia sólo sabe salir a un campo a atacar, un detalle que facilitaría el contragolpe de Villa y de Torres, dos delanteros muy rápidos. Aunque España podría disputar tres partidos en un espacio de siete días no se han modificado los hábitos alimenticios de los jugadores. Sólo en la parcela de la hidratación. En Viena hay una diferencia de temperatura que ronda los diez grados respecto a Neustift y los doctores han recomendado a los internacionales que no dejen de hidratarse antes, durante y después de los partidos. Sí que han bajado el ritmo en los entrenamientos. Son más cortos y más suaves para facilitar la recuperación. Hoy no se ejercitaron en el campo por la mañana y acudieron a una sesión de aguas en el mismo hotel de concentración. Es un éxito que en un mes de concentración sólo Puyol haya tenido un pequeño percance. España se despidió de las instalaciones de Neustift y ya no volverá a este paraje, salvo para celebrar el título o para recoger los enseres. Xavi es uno de los veteranos de la selección y un peso pesado del vestuario. El cerebro del equipo nacional asegura que la plantilla «está preparada para hacer historia» en esta Eurocopa, pero advierte de que la semifinal contra Rusia será complicada y de que el aspecto físico puede resultar «clave» porque los de Hiddink están un punto por encima. Y, sin desmerecer el ambiento creado en otras competiciones internacionales, destaca la armonía de un grupo «especial». «La historia nos debía una», subraya.

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