El Feve San José se deja el primer puesto en Grecia

El Feve San José no pudo mantener su imbatibilidad europea. El Athinaikos, con un gran nivel de acierto exterior y la ayuda de los árbitros en los momentos más importantes del encuentro hicieron estéril el gran partido de las leonesas en ataque, que estuvieron muy bien de cara al aro rival. A las leonesas les tocará seguir ganando en la Eurocopa y superar a las griegas por más de 15 puntos en León si quieren seguir aspirando al primer puesto del grupo D de esta Eurocopa Femenina. Los dos equipos llegaban al encuentro de ayer en el coqueto Ergani Sports Hall igualados al frente de la clasificación. Las griegas con la moral reforzada por su imbatibilidad en esta temporada en todas las competiciones en las que están inmersas y las leonesas buscando que Europa fuera de nuevo un bálsamo para sus heridas en la liga española. El premio para el ganador no era un premio más, sino certificar la clasificación para los dieciseisavos de final el día que esta fase previa alcanzaba su ecuador. La tensión y los nervios de la importancia del triunfo que se ponía en juego se notaba en los primeros compases del choque en el que ninguno de los dos equipos parecía capaz de soltar su muñeca. Las griegas dejaban claro que son un bloque más compacto que el Panionios que la semana pasada se midió a las leonesas en el Palacio de Deportes de León y que cuentan con un referente claro en la pintura, el de Latoya Davis, bien complementado por fuera por su otra estadounidense, Katie Gearlds ayer apoyada por una excepcional Kosma. Enfrente, las de Miguel Ángel Estrada trataban de dominar el rebote y correr, que es su juego natural con Murphy como estilete ofensivo ayudada ayer por María Revuelto que alcanzó por primera vez en esta temporada su nivel habitual. Con esos argumentos el equipo griego tomó sus primeras ventajas antes de que el Feve San José firmara sus mejores minutos con un parcial de 12-0 que colocaba el tanteador con una ventaja leonesa que no era mayor porque el arbitraje de ayer era exageradamente casero, tanto que por dos veces metieron en el partido a las griegas cuando iban seis tantos por detrás en el marcador. Una técnica a Estrada, tres faltas inexistentes y un sinfín de decisiones incomprensibles dieron alas a las griegas cuando más complicado lo tenían. El segundo cuarto empezaba con ventaja leonesa, pero en él las locales iban a mostrarse infalibles desde más allá del arco de 6,25 metros (anotaron cinco triples seguidos en ese periodo) y con ello se marchaban diez puntos arriba que quedaban reducidos a siete cuando los dos equipos caminaban hacia el vestuario con un 48-41 en el tanteador y la sensación de que el Athinaikos no podía perder porque no le iban a dejar hacerlo los colegiados. Y así fue. El regreso a la pista tras el intermedio ya no fue necesario que los colegiados inclinaran la balanza. Las tiradoras del Athinaikos no bajaban su nivel y, aunque el ataque del Feve San José seguía siendo muy fluido, con porcentajes por encima del 60% en los lanzamientos triples, a golpe de acierto desde más allá de 6,25 metros (las helenas anotaron 13 seguidos sin fallo) las distancias se estiraban hasta los 20 puntos. El último cuarto no sobró porque el San José nunca bajó los brazos aunque la situación invitara a ello. El primer puesto del grupo podía depender de esos 10 minutos finales y los dos conjuntos se emplearon a fondo. El Athinaikos seguía con su impresionante nivel de acierto y el San José, ya sin Murphy (28 puntos en 25 minutos de juego), condenada al banquillo por dos faltas seguidas que no existieron más que en la mente de los árbitros, siguió dando la cara. El equipo leonés sólo pudo cerrar el choque con una desventaja de 15 puntos que será complicada de dar la vuelta en León, pero no imposible porque dentro de tres semanas será imposible que las griegas firmen el 63 por ciento en los lanzamientos de tres puntos que redondearon ayer jueves.