La crisis blanca amenaza a Plaza Rudy y Sergio se reivindican con una gran victoria sobre la bocina

La crisis en la sección de baloncesto del Real Madrid ha alcanzado de lleno a Joan Plaza, que ya fue cuestionado al final de la pasada temporada, cuando el equipo fracasó al despedirse a las primeras de cambio de los play offs por el título ante el Unicaja, con el factor cancha a favor, tras quedarse fuera de la Final Four disputada en la capital. El Madrid aún está deprimido por aquella ausencia de la lucha por el título continental y aunque Ramón Calderón asegure que Plaza no corre peligro, porque el técnico sigue contando con la confianza de Antonio Martín y Alberto Herreros, el entrenador catalán se tambalea en el banquillo después de cuatro derrotas consecutivas. «Joan dice que está contento con el equipo, que se encuentra en fase de adaptación, y está convencido, al igual que nosotros, de que va a rendir en los momentos clave», aseguró este viernes Herreros, adjunto a la dirección del baloncesto madridista, que de momento no se plantea medidas drásticas, aunque puede acabarse la paciencia si no cambian de inmediato los resultados. El duelo de hoy en la Liga ACB contra el DKV Joventut en Badalona (20.00 horas, La 2) se presume clave para el entrenador del Real Madrid, que, sólo en teoría, dispone de un equipo mejor al de la pasada campaña, con los refuerzos de Pepe Sánchez, Hosley y Massey y el regreso de Marko Tomas. Se marcharon Charles Smith, Tunceri, Sekulic, Iturbe y Pelekanos, y el equipo se ha resquebrajado en todas sus líneas y acusa ansiedad en este sorprendente arranque de temporada en el que se ha puesto en evidencia el pobre estado de forma de varios jugadores. Además, el técnico no encuentra soluciones entre tanto individualismo en un conjunto al que ya no le vale sólo con la casta. El primer paso han sido los pitos de Vistalegre al negado Papadopoulos y a Pepe Sánchez tras la derrota en la Euroliga ante el CSKA de Moscú, con sólo 54 puntos al campeón continental y un pésimo 2 de 18 en triples. Si no se pone remedio, la indignación de los aficionados apuntará pronto a Plaza y a la dirección, que se verá obligada a dar un cambio de rumbo, con un relevo en el banquillo, o con algún fichaje que ilusione de nuevo a una sección que vuelve a estar a la deriva. El nuevo proyecto blanco ofrece demasiadas dudas y precisa de mayor potencial en el interior, donde sólo responde Felipe Reyes, porque Papadopoulos, obligado a quedarse con un sueldo de dos millones de euros, no reacciona, Massey todavía no se ha acoplado, Hervelle atraviesa un preocupante bajón tras una lesión de rodila, y Hamilton aún no está completamente recuperado de su grave lesión que casi le dejó inédito las dos últimas temporadas. Además, para el choque contra el Joventut volverá a ser baja Tomas, a causa de un esguince en la clavícula, y el tiro exterior, salvo que lo remedie Bullock, seguirá también muy resentido. Rudy Fernández, con 15 puntos y su mejor porcentaje de acierto desde su debut en la NBA, puso el espectáculo, Sergio Rodríguez las asistencias (seis en 11 minutos y medio), y ambos disfrutaron de una milagrosa victoria de Portland sobre Houston, en la prórroga, y sobre la bocina (101-99), para conseguir su segundo triunfo de la temporada en cinco partidos. Aunque el héroe fue Brandon Roy, con un impresionante triple cuando el tiempo ya estaba cumplido y los Rockets estaban a punto de celebrar la victoria, Rudy y Sergio se reivindicaron ante su entrenador, Nate McMillan, y ante su afición, para demostrar que son dos jugadores importantes en este inicio de campeonato en el que los jóvenes Blazers aspiran a los play offs por el título. A pesar de todo, ante la nula confianza que McMillan tiene en Sergio, el representante canario ha solicitado ya a Portland su traspaso a otro equipo en el que pueda disponer de más minutos y se le trate «de una forma más natural», después de que la franquicia de Oregón haya renovado recientemente el contrato del ex del Estudiantes. Sergio Rodríguez, líder de asistencias por minuto jugado, no estuvo sin embargo acertado en el tiro ante Houston, ya que lanzó tres veces a canasta, incluidos dos lanzamientos de triple, y no anotó ningún punto, aunque también colaboró con tres rebotes, dos de ellos defensivos. Volvió a funcionar la conexión con su amigo Rudy, y Sergio sólo se vio superado por las ocho asistencias del base titular de Portland, Steve Blake, que en casi 28 minutos anotó ocho puntos.