El Feve sufre para doblegar al Ragusa croata (71-66)

El Feve San José sufrió más de lo previsto para superar al Ragusa en un partido en el que fue a remolque durante muchos minutos. Las de Estrada se encontraron con un rival inesperadamente tenaz y acertado que complicó el partido hasta casi el último suspiro, cuando las leonesas supieron asestar el golpe definitivo con dos triples que acabaron con la resistencia de las croatas. Pese a todo, la victoria ante el Ragusa sirvió para que el equipo leonés sellara su pase a la segunda ronda. La superioridad del San José, que ya quedó confirmada en el partido de ida, era un argumento suficiente para superar al equipo croata, que en condiciones normales no debía presentar demasiada resistencia a las de Miguel Ángel Estrada y que sin posibilidades ya de clasificación afrontaban el partido como un trámite. A pesar de las ausencias de Mendiola y Revuelto, el San José debía de sumar su tercer triunfo en la competición continental. El partido comenzó de forma sorprendente, con un 2-6 de salida para las croatas que se convirtió en un 4-10 cuando sólo habían psado tres minutos de juego. En esos momentos el equipo leonés jugaba de forma muy precipitada, sorprendido quizás por la inesperada salida de Ragusa, que con una buena defensa ahogaba el juego exterior de las leonesas. Hasta casi el final del primer periodo, el quipo leonés no comenzó a creer en si mismo y en el último minuto del segundo cuarto desarrolló su mejor juego para, por fin, ponerse por delante en el marcador (38-37) después de dos tiros libres convertidos por Djuric. Al inicio de la segunda parte, dos punos de Murphy pusieron de manifiesto la intención del Feve de buscar la iniciativa en el marcador peroel Ragusa nose arrugaba y mantenía las constantes de su juego. Vrdoljak hacía mucho daño con sus movimientos y el Feve seguía a remolque hasta que apeló de nuevo a la casta para por lo menos terminar el tercer cuarto con dos puntos por encima (58-65), ventaja que se agrandó a cuatro puntos al comenzar el último cuarto tras una canasta de Murphy. Parecía que el Fefe había encontrado la fórmula para distanciar a su rival, pero el Ragusa seguía sin darse por vencido y un tiro libre de Matij puso otra vez las espadas en alto (65-64). Durante dos minutos el marcador no se movió hasta que Djuric clavó un triple a dos minutos del final que parecía definitivo, pero no lo fue hasta que hizo un nuevo triple que puso cinco puntos a un minuto y medio para el final.