La muralla vuelve a ganar (0-1)

La Cultural reafirmó ayer su condición de líder tras imponerse al celta B en un encuentro en el que los de Álvaro Cervera hicieron valer su mayor experiencia y calidad para sumar tres nuevos puntos. Los leoneses jugaron un buen partido, sin especulaciones. Defendieron con orden, dieron el balón a su rival y contraatacaron cuando lo vieron claro. Además, la Cultural volvió a mostrarse muy acertada de cara a puerta y consiguió el gol de la victoria en una de las pocas ocasiones de que dispuso, al borde del descanso. El 0-1 en las postrimerías de la primera parte dejó tocados a los locales, mientras que a los de Cervera les permitió jugar, si cabe, con mayor comodidad y tranquilidad. Así, la Cultural puso punto y seguido a su buena racha, y ya van siete partidos sin perder y, lo que dice aún más, sin encajar ningún gol. Ante estos números, el Celta B tenía claro que su única opción pasaba por tener el balón e intentar buscar la portería rival una y otra vez. Pero no fue suficiente, ya que la sólida defensa leonesa estuvo, una vez más, impecable, y consiguió desbaratar todos los intentos de los locales. Los locales ponían el juego, pero de poco les servía ante el control y el saber estar de los de Cervera, que no permitieron nunca al Celta poner en práctica su juego combinativo. Fue un encuentro trabadoen el que la Cultural controló el paso del tiempo y el ritmo del juego. Sobre todo, porque la Cultural dejó muestras desde el minuto uno de por qué es el equipo menos goleado de la categoría al no permitir siquiera un atisbo de lanzamiento con peligro sobre su portería en todos los primeros cuarenta y cinco minutos. Los vigueses lo intentaban, pero la Cultural secó a sus dos referentes ofensivos, Iago Aspas y Mateo. No había fisuras en la defensa leonesa y ni siquiera las bajas se dejaron notar. Así las cosas, los únicos acercamientos con peligro que hubo en la primera mitad fueron para los leoneses, en dos disparos de Óscar Rico y Chema, aunque ambos dispararon muy desviado de la portería local. Fue el aviso de lo que pasaría a falta de tan sólo dos minutos para el descanso, cuando Chema aprovechaba un rechace dentro del área, tras una arrancada del lateral diestro Goikoetxea, para hacer el 0-1. Era la gota que colmaba el vaso de la desesperación de los celestes. Y es que los locales lo habían intentado todo y no habían conseguido ni siquiera acercarse a las inmediaciones de la portería de Bermúdez. El gol dejó helados a los vigueses, que en la segunda parte acusaron el golpe. Y es que los segundos cuarenta y cinco minutos fueron un querer y no poder del filial celtiña, que buscaba a la desesperada huecos para poder, al menos, probar un disparo a puerta. No los había. Lo probaron todo los locales: cambios, intercambio de posiciones entre los jugadores, tiros lejanos, pero nada funcionaba y la presión leonesa era cada vez más asfixiante. Las ocasiones locales seguían brillando por su ausencia y los visitantes se limitaban a esperar en su campo, sin pretensiones siquiera de intimidar a Yoel. Hasta que llegó el descuento de cinco minutos, que concentró más intensidad que los noventa previos. El Celta B estaba dispuesto a poner toda la carne en el asador y hasta el central Jordi se sumó al ataque como un delantero más y forzó, primero, una dejada para que Pedro probase por primera vez a Bermúdez (min.90) y, después, una falta al borde del área en cuyo lanzamiento Dani Gail volvió a comprobar que la Cultural tiene un gran portero. Sólo tuvo trabajo en los últimos cinco minutos, pero su actuación fue providencial de cara al resultado final. Al central vigués Jordi incluso le dio tiempo a ser expulsado con dos amarillas en dos minutos, la segunda por fingir un penalti que el colegiado no señaló. Al final, victoria justa de la Cultural, que se mantiene en la zona de ascenso y sitúa en ocho la racha de partidos sin perder y sin encajar un solo gol.