Diario de León

Balonmano | El Mundial, al rojo vivo

Los ademaristas Alilovic y Buntic quieren llevar hoy a Croacia a la final

Jordi Ribera, acompañado de su segundo Jacobo Cuétara, durante un entrenamiento con el Ademar

Jordi Ribera, acompañado de su segundo Jacobo Cuétara, durante un entrenamiento con el Ademar

Publicado por
G. Fernández
León

Creado:

Actualizado:

león

Después del decepcionante paso de España por el Mundial, la afición leonesa seguro que se ha vuelto croata. Gustos al margen, el hecho de que en el conjunto balcánico jueguen dos ademaristas: el meta Mirko Alilovic y el lateral Denis Buntic, ha aumentado las simpatías por los croatas para llevarse el oro en el Mundial de su país.

No lo tendrán fácil porque antes tendrán que eliminar hoy a la potente selección polaca, con buena parte de sus jugadores enrolados en una liga tan potente como la alemana.

El plan diseñado por los croatas para alcanzar la final se cumple paso a paso y para las semifinales han enviado a Francia y Dinamarca a medirse en Split, un viaje de ida y vuelta de casi 400 kilómetros (también hoy viernes, 17.30 horas), mientras Croacia descansa en Zagreb y se prepara para arrasar a Polonia (20.30 horas) en la otra semifinal que ha deparado el Mundial que toca a su fin en el país balcánico.

Los polacos, semifinalistas por segundo Mundial consecutivo (en Alemania 2007 llegaron a la final), se presentan como las próximas víctimas propiciatorias para que la fiesta no pare en Zagreb y Cervar y sus jugadores pugnen por el oro con Francia, la otra aspirante al cetro mundial.

Los croatas son un equipo veterano, que necesita descanso. Llegan a esta semifinal con dos días de inactividad desde su clasificación y arropados por 15.000 croatas dispuestos a reeditar el último festival, frente a la selección francesa.

tracking