Fútbol | Tercera División
El Huracán vence al Almazán pese a jugar en inferioridad
El trepalense Carlos Manuel fue expulsado en el minuto 49 de partido
Almazán
El Huracán Z logró una meritoria victoria en tierras sorianas ante un Almazán que desaprovechó un penalti en la segunda parte y el hecho de contar con un jugador más sobre el terreno de juego durante prácticamente cuarenta minutos.
La nota predominante de la primera parte fue la igualdad, que presidió el encuentro en los primeros compases. Ambos conjuntos se iban a alternar el dominio en el juego y tan pronto era uno el que tomaba el mando, como cinco minutos después lo cedía al otro.
A los trepalenses, eso sí, les iba a ayudar el hecho de inaugurar el marcador tan sólo cuatro minutos después del pitido inicial. Fue en un pase largo, casi de área a área, cuando el balón le llegó a Álvaro para por velocidad superar a toda la defensa y plantarse solo ante el portero para batirlo por bajo.
El partido se le ponía cuesta abajo al Huracán, que ahora con un gol de ventaja podía especular un poco con el marcador para poner nervioso al conjunto local.
Pese a todo no se vino abajo el Almazán tras el gol de Álvaro y siguió dando la cara al partido. Muy pacientemente iban ganado metros los sorianos y poco a poco se acercaban con más peligro a las inmediaciones de la meta de David.
Sin embargo el goleador Álvaro iba a ser el verdadero protagonista de los primeros cuarenta y cinco minutos. El trepalense traía por el camino de la amargura a la zaga local y aprovechaba cualquier pequeño resquicio de la defensa local para crear peligro.
Tras el paso por vestuarios el partido iba a dar un vuelco después de que en los primeros instantes de la segunda mitad el colegiado señalara penalti por mano de Carlos Manuel dentro del área y expulsara al jugador del Huracán. Pero Bachi erró la pena máxima, mejor dicho, la detuvo David y eso dio alas al Huracán, que lejos de venirse abajo en inferioridad numérica se creció todavía más. Cuando más apretaba el Almazán, Edgar botaba una falta desde el centro del campo y la mandaba a la red. Fue la sentencia.