Diario de León

Fútbol | Final de la Copa del Rey

Barça y Athletic: cita con la historia para los ases de copas

Los rojiblancos quieren igualar los títulos del Barcelona 25 años después de su último trofeo

Publicado por
Amador Gómez
León

Creado:

Actualizado:

madrid

El Ba rça y el Athletic tienen hoy una cita con la historia. La gran final que disputarán en Mestalla (22.00 h. TVE1) los ases de copas supone para los azulgrana la posibilidad de conquistar su primer título de la temporada y abrir las puertas del soñado triplete. Y para los rojiblancos adjudicarse la corona 25 años después de su última gesta e igualar al Barcelona en el palmarés oficial. Ambos atesoran 47 trofeos, aunque el Athletic también reclama la Copa de la primera edición de 1902 que ganó el Vizcaya. Son tantos títulos como los que se han adjudicado juntos el Real Madrid, el Atlético, el Valencia, el Zaragoza, el Sevilla y el Espanyol.

No podía haber final copera de mayor enjundia. De tanta trascendencia para Barça y Athletic, que representan dos estilos y modelos muy diferentes, aunque los azulgrana también apuestan por la cantera. El fútbol espectacular, ambicioso, de toque y demoledor en ataque del Barcelona, y el aguerrido, de físico, raza y orgullo del Athletic. La clase contra el músculo. La genial creación frente a la contención y el despliegue. El Barça es favorito, pero el Athletic de la ilusión, con el que se ha volcado todo un pueblo apasionado y una juventud que nunca ha visto a su equipo campeón, ya tiene preparada la gabarra para la esperada fiesta del viernes.

También ha demostrado capacidad para sobreponerse a la presión y golear: 3-0 al Sevilla en la vuelta de semifinales. Entonces fue en San Mamés. Este miércoles será en Mestalla, donde se esperan 35.000 aficionados del Athletic para dar el golpe.

Ya lo consiguió hace un cuarto de siglo frente al Barça de Maradona en la batalla campal del Bernabéu. Ahí le hubiera gustado repetir al Athletic, y en sábado, no la noche de un día laborable y en un escenario en el que sólo caben 50.000 espectadores. Ahora el reto es superior. Contra el de Messi, frente al mejor Barcelona que se recuerda -”aunque debe refrendarlo con títulos en todos sus frentes-”, el que practica el mejor fútbol en el mundo.

El cansancio y Llorente

Sin embargo, el Barça llega muy castigado, física y mentalmente. Sin los lesionados Iniesta -”un durísimo varapalo para los culés -”, Henry, Márquez y Milito, y sin el sancionado Abidal, y con una carga añadida en su cabeza: la final de la Copa de Europa del 27 de mayo en Roma.

Ese es el mayor peligro para el Barça: el cansancio. Por ello, Guardiola, al igual que hizo dos días antes del 2-6 al Madrid, cuando concedió jornada de descanso, dio ayer la tarde libre a sus futbolistas, con el objetivo de desconectar. Los azulgrana no viajarán a Valencia hasta el mismo día del partido. El Athletic, en cambio, ha tenido mucho tiempo para preparar la final, y tras ser despedido el domingo en Bilbao por 20.000 seguidores antes de desplazarse a la capital del Turia, siente una responsabilidad aún mayor para responder a las expectativas. Para regresar, con la Uefa ya asegurada, al primer plano de la actualidad con una Copa que daría la vuelta al planeta y desde algunos sectores casi se considera un asunto de Estado.

Con las armas que siempre han caracterizado a los leones . Las del Barcelona son más y, a priori, muy superiores, para ganar un torneo en el que no conoce el éxito desde hace 11 años. Por ello, el Athletic, que también tiene mucho peligro a balón parado y en el juego aéreo, cuando los azulgrana sufren demasiado en las acciones de estrategia, no debería verse superado por las ansias. Por pasarse de revoluciones y excederse con la presumible dureza que empleará ante un Barcelona que marea con el balón en los pies y, de momento, siempre ha sabido medir muy bien los tiempos, excepto en el descuento del pasado domingo, cuando Joseba Llorente frustró la celebración de la Liga en el Camp Nou y Canaletas.

Hoy, la amenaza es otro Llorente. Fernando. Guardiola, que ha insistido en la necesidad de frenar el juego directo del goleador riojano y estar muy atentos a los rechaces, augura una final «sufrida, intensa, igualada». Joaquín Caparrós coincide en una final «muy disputada», e incluso habla de «riesgo de lesión».

Para el Athletic, conjurado para imprimir al choque intensidad máxima y asfixiar al poderoso rival, esta Copa tiene mucho más importancia que para el Barça. La guerra también es psicológica, y los azulgrana ni siquiera han ensayado penaltis. Si consiguen imponer su fútbol, lo lógico es que no los necesiten. Sin embargo, en estos partidos no sólo manda el juego. También la fuerza de piernas y de cabeza, y esa es la baza de la que presume el Athletic.

tracking