Aniversario de oro y leyendas

El día acompañaba. Y aunque no hubiera sido así era lo mismo. La pasión que desata el Gran Premio de Velocidad de La Bañeza es tal que año tras año la cifra de espectadores se queda corta con referencia a los venideros. Si en el 2008 más de 40.000 personas fueron testigos de una prueba emocionante de principio a fin ayer esta cifra se elevó a las 50.000.

La celebración de las bodas de oro del Circuito Motorista Bañezano y la amplia nómina de pilotos junto a la presencia de Álvaro Bautista fueron parte de los argumentos que llevaron al Gran Premio a otro récord en su ya exitosa historia. Desde el viernes el olor a motociclismo se fue notando en la ciudad. Primero con el emotivo homenaje a los 35 magníficos y la posterior cena de gala, luego con los entrenamientos oficiales del sábado y como colofón ayer con la disputa de la carrera. Y es que pocas veces en tan poco espacio (cerca de dos kilómetros conforman el trazado de la prueba) se puede aglutinar a tanta gente. Ceras pobladas, edificios donde todas las ventanas mostraban a más y más personas y hasta vallas donde el más osado lograba situarse para vez mejor el evento. En suma, un reguero de pasión, devoción y mucha afición a un deporte que ayer demostró que con dedicación y sacrificio puede convertirse en la mejor expresión de un Motoclub que ayer al completo trabajó a destajo junto a Policía Municipal, Guardia Civil, Cruz Roja y demás para que ninguna cosa quedara al azar. Y si pilotos y público acompañan entonces el éxito está, un año más, asegurado.