fútbol. SEGUNDA DIVISIÓN B
La Cultural debe aprender a ganar (1-1)
El Pontevedra empata un encuentro que tenía perdido y en el que apenas hizo ocasiones de gol pero aprovechó un contragolpe y un error defensivo del equipo leonés, cuando Jito pudo sentenciar
Un defensor del equipo granate salta sobre el culturalista Jito impidiendo el remate de éste con la
La Cultural inició la competición liguera frente al Pontevedra, un rival sobre el papel también llamado a luchar por el ascenso. Y en contra de lo que pudiera parecer el equipo leonés se mostró mucho más ambicioso de salida, comenzando a encerrar a los granates en su área, lo que se tradujo en una primera ocasión para los blancos en el minuto dos de juego, cuando Jahvé lanzó un libre directo en la frontal del área gallega a la escuadra izquierda de la meta defendida por Orlando Quintana, obligando a éste a una gran intervención enviando el balón a córner.
Instantes después una buena combinación entre Chema y Ferrán acaba con un remate al exterior de la red de este último. Sin embargo, esta fulgurante salida permitió al Pontevedra buscar el contragolpe, aunque sus acciones morían en estos primeros minutos en los pies de la ordenada defensa culturalista.
Superados los diez primeros minutos el dominio territorial comienza a igualarse, lo que se traduce en un exceso de juego en el centro del campo con desplazamientos en largo buscando la espalda de las respectivas defensas, pero sin apenas crear peligro ante el marco contrario.
Sin embargo, en el minuto 12, una rápida salida del ataque culturalista es llevada espléndidamente por Ferrán por su banda izquierda, centrando al interior del área de meta pontevedresa, apareciendo Jito para rematar a gol, pero el balón se estrella en el poste izquierdo de la portería visitante con Orlando Quintana ya batido. El rechace es desviado a córner por un defensor granate.
Pese a la igualdad existente es la Cultural la que sigue llevando el peso del encuentro y creando las pocas ocasiones de gol existentes hasta ese momento. Así, en el minuto 29 es Chema el que lo intenta, pero su remate se pierde ajustado al poste izquierdo de la meta visitante.
En el minuto 33 una penetración de Cerveró por la banda derecha para centrar al interior del área, siendo despejada a córner por un defensor cuando Jito estaba en boca de gol para enviar al fondo de las mallas.
Poco a poco los minutos siguen pasando y el juego se embarulla en la parcela central, aunque ahora los pontevedreses comienzan a estirarse algo pero sin crear peligro real ante el marco defendido por Saizar, llegándose al intermedio sin ninguna variación en el marcador.
En la reanudación todo siguió igual. En el minuto 49 llegaría la jugada clave del partido al señalar el colegiado penalti a favor de la Cultural por un claro derribo a Jito en el interior del área. El propio Jito transforma la pena máxima estableciendo el 1-0 un minuto después.
La respuesta pontevedresa no se hizo esperar y apenas tres minutos más tarde Charles disfruta de una gran ocasión para establecer el empate, pero en vez de rematar solo ante Saizar envía hacia atrás a un compañero, despejando la defensa blanca.
Jito puede aumentar la diferencia en el minuto 58, pero no acierta a batir a Orlando Quintana con todo a su favor tras una espléndida jugada personal de Chema.
Y como suele suceder en el fútbol, el que perdona lo paga. Dos minutos después llegaría la igualada visitante. Un balón en profundidad es controlado por Ivan Carril en el interior del área probablemente ayudándose con el brazo y en posición de fuera de juego, para que Nevado envié al fondo de las mallas en segunda instancia tras haber sacado bajo los palos el primer remate la defensa leonesa. Era el 1-1.
A partir del empate el Pontevedra toma el mando del partido, obligando a la Cultural a replegarse en su parcela, siendo ahora los gallegos los que buscan el gol de la victoria.
Los últimos minutos fueron un auténtico correcalles, con dos equipos muy cansados y que olvidaron todo el sistema táctico montado por sus entrenadores para buscar la portería rival.
