El Palacio debe ser un fortín

El Reale Ademar ya ha pasado página tras el decepcionante empate cosechado el fin de semana pasado en la pista del Alcobendas, una cancha que en en los últimos tiempos sólo reserva que amarguras al equipo leonés. Las miras de todos están ahora puestas en el encuentro de alto voltaje que disputarán el próximo fin de semana en su feudo ante el Ciudad Real. Y el objetivo es claro: salir a muerte para que los dos puntos se queden en el Palacio de Deportes.

En una liga tan exigente como la Asobal los tropiezos se pagan muy caros -”el Ademar todavía lo recuerda bien de la pasada campaña-” y los leoneses no quieren encadenar dos seguidos.

La tarea no es sencilla pero el equipo quiere empezar la temporada en el Palacio con buenas sensaciones. «Lo sucedido en Alcobendas hay que dejarlo atrás. A lo hecho pecho. Ahora estamos en un periodo de corrección de errores y a pensar ya en el Ciudad Real porque este es un partido que tenemos que prepararlo muy bien», manifestó ayer el técnico leonés Jordi Ribera.

Y eso pese a ser consciente de que el conjunto manchego ha perdido potencial este año con la marcha de jugadores de primera línea mundial como Rutenka (ahora enrolado en el Barcelona), Stefansson o Pajovic. Sin olvidar a otros como Zorman o Uríos, este último retirado.

«Han empezado perdiendo la Supercopa -”apuntó el técnico-” pero también empezaron perdiendo este torneo el año pasado ante el Barcelona y alfinal ganaron la liga». De hecho, los manchegos tuvieron un arranque liguero desastroso con dos derrotas al inicio que parecía descartarlos para el título aunque al final fue todo lo contrario. «Pese a las bajas, mantiene un bloque muy sólido y junto con el Barcelona está un escalón por cencima de los demás», añadió Ribera en este sentido.

Tampoco cree que el Ademar, por el hecho de haber jugado la fase previa de la Liga de Campeones, llegue mucho más afinado a este partido. «Ellos también jugaron la Supercopa y no creo que el Ademar esté mucho más rodado ni que tengamos una ventaja por el hecho de jugar esa fase previa. Estos son presupuestos que también deberían haber servido para el partido ante el el Alcobendas y no fue así».

El técnico tiene claro lo que debe hacer su equipo el próximo sábado: « Jugar bien y jugar al máximo, sin despistes y concentrados en el partido desde el primer minuto». Sencillo en teoría, pero cuando el balón empiece a moverse seguro que ya no será tan fácil.