FÚTBOL. SEGUNDA DIVISIÓN B
Defensa de campeón
La media de goles encajados por la Ponferradina es inferior a la que permitió al Real Unión de Irún terminar en primera posición la pasada temporada
Mackay detiene un penalti durante el partido de Copa del Rey ante el Eibar en El Toralín.
El trabajo defensivo de la Ponferradina 2009-10 permite soñar con que el equipo esté en lo más alto de la tabla a final de temporada. El conjunto de José Carlos Granero sólo ha encajado diez goles en las dieciocho jornadas disputadas, lo que arroja una media de 0,55 por partido, muy inferior a los 0,65 con los que el Real Unión logró el campeonato la temporada pasada.
El equipo berciano supera también los registros de la Cultural Leonesa el pasado año, que fue el equipo menos goleado del grupo con 23 tantos en contra, una media de 0,60 por partido.
El mérito deportivista consiste en que recibe pocos goles porque a sus rivales les cuesta mucho crear ocasiones, ya que la Deportiva de Granero es un equipo que sabe conservar el balón y madurar las jugadas, impidiendo al contrario el control del juego, salvo contadas excepciones.
De hecho, sólo dos equipos han sido capaces de hacerle más de un gol a la Ponferradina, el Montañeros y el Izarra, y los dos tuvieron como premio los tres puntos. Se da la casualidad de que ambos equipos son recién ascendidos a la categoría de bronce. En el resto de partidos, salvo en la derrota por la mínima en Palencia, la Deportiva ha conseguido contrarrestar los goles de sus rivales, ya sea para conseguir un empate (Mirandés, Osasuna B y Barakaldo) o para llevarse la victoria, como ocurrió ante el Compostela y el Racing de Ferrol.
Si se quiere personificar el buen hacer defensivo de la Ponferradina, hay que recurrir a los dos porteros que José Carlos Granero ha utilizado hasta la fecha. El técnico valenciano comenzó confiando la portería a Alejandro, que encajó seis goles en diez partidos, pero luego le dio la alternativa a Mackay, que en los ocho partidos que ha jugado ha recibido sólo cuatro goles. Ambos porteros tienen los mejores coeficientes del grupo I, y sólo Pagola, cancerbero del Alavés, se les aproxima, con diez goles encajados en quince partidos.
Sin embargo, como dice el propio Granero, el mérito debe corresponder a todo el equipo, que ha sabido adaptarse a sus esquemas para terminar el año como la mejor defensa de toda la Segunda División B.