La Unión Europea da un mes de plazo a Grecia para corregir su déficit público
El Eurogrupo tiene plena confianza en el plan de Papandreu pero anunció que si no cumple sus promesas impondrá sus medidas de ajuste a la economía helena
Grecia tiene un mes para demostrar que está efectivamente dispuesta a corregir su déficit público. Ayer, los ministros de Finanzas de los 27 convalidaron las decisiones adoptadas la víspera por el Eurogrupo, arrinconando las demandas adicionales de rigor a Atenas hasta que el Programa de Estabilidad revisado presentado por el Gobierno heleno haya iniciado su andadura, y se verifique que las medidas comprometidas han sido adoptadas o estén en vías de serlo. El Ejecutivo de Yorgos Papandreu ha presentado un plan de ajuste extremadamente severo, que la Comisión la semana pasada, y el Consejo ayer, han aprobado. Sin que las iniciativas previstas hayan rendido aún fruto, exigir más parecía fuera de lugar al Ecofin. El presidente del Eurogrupo, Jean-Claude Juncker, resumió la situación la noche del lunes cuando dijo que los miembros de la Eurozona «creemos que se trata de un plan correcto, y que el gobierno de Papandreu es serio. Tenemos plena confianza en el plan de ajuste».
Cuenta atrás. Por lo tanto, Atenas cuenta con apenas un mes para poner en marcha el grueso de su Programa revisado de Estabilidad: recortes salariales, cambios en el modelo de negociación colectiva, reformas en los mecanismos de sanidad y asistencia pública, y otras curas de caballo que la sociedad helena va a tener que aplicarse, si no quiere afrontar males mayores.
La Unión Europea no espera resultados de esas medidas para dentro de un mes, sino que concluya el ejercicio con la reducción efectiva de cuatro puntos de PIB en el déficit presupuestario. Si no fuera así Atenas tendrá que salir de las reuniones del Eurogrupo y el Ecofin en las que se votarán las acciones que la UE juzgue necesarias para corregir la situación, y que se adoptarán a la mayoría cualificada, sin el concurso de la representación griega.