Diario de León

Entrevista

«La reforma no está nada alejada de la doctrina socialista»

El titular de la cartera de Trabajo reflexiona sobre el pacto social conseguido y su repercusión en el sistema durante los próximos años. Considera «normal» que haya fuentes alternativas de financiación del sistema a &laq

Valeriano Gómez, ministro de Trabajo.

Valeriano Gómez, ministro de Trabajo.

Publicado por
josé luis galende | madrid
León

Creado:

Actualizado:

Artífice de un acuerdo sobre las pensiones en el que muy pocos creían, la fatiga que refleja el rostro de Valeriano Gómez da testimonio de tres semanas de incierta e intensa negociación; y sus profundas ojeras, de las muchas horas robadas al sueño durante unas conversaciones celebradas con frecuencia en horario intempestivo. A las siete de la tarde aún le queda mucha jornada laboral por delante en un día en que la subida del paro registrado, su principal preocupación, ha ensombrecido el acto de la firma del acuerdo con los agentes sociales en el palacio de La Moncloa. -”¿Es esta la reforma que quería el Gobierno?, ¿tuvo que ceder terreno para alcanzar un acuerdo con los sindicatos?

-”El Gobierno quería una reforma ambiciosa, que lograra despejar las incertidumbres en el medio y largo plazo sobre el sistema de pensiones. También quería que fuera pactada y que tuviera un amplio respaldo parlamentario. Y estamos en esos tres factores muy cerca del nivel óptimo. Por tanto, sí se parecen los cambios acordados con lo que planteábamos.

1397058884 Pero no va tan lejos como la que propuso Rodríguez Zapatero hace ahora un año-¦

-” Entonces el Gobierno planteó genéricamente que era necesario elevar la edad de jubilación a los 67 años, y en esto está en la reforma. Pero hay una franja de edad entre los 63 y 67 años para hacerlo, y se mantiene la posibilidad de retirarse a los 65 si la gente tiene una carrera de cotización suficientemente larga. Hay también una ampliación del periodo de cálculo de los 15 a los 25 años, el mayor salto en esta materia que nunca se había dado; se mantiene la jubilación parcial y anticipada, que juegan un papel importante en el ajuste de las empresas, aunque hay medidas que la desestimulan.

-” A falta de la negociación con los sindicatos, ¿tiene ya en mente a qué colectivos beneficiará la reducción de la edad de jubilación?

-” La clave está en hablar de ocupaciones, no de sectores, y de ahí la dificultad del estudio. No es lo mismo un trabajador de una explotación de granito o mármol que un electricista de la construcción. Ni un fachadista, que tiene un riesgo claro, que un alicatador.

-” ¿Está pensando el Gobierno en la edad de retiro de estos colectivos y cuántos trabajadores podrán acogerse a esa medida?

-” Es prematuro hablar de cifras. Obviamente, en un sistema que tiene más de 17 millones de cotizantes no puede haber millones que tengan edades de jubilación ostensiblemente inferiores a las de los demás. Estamos hablando de ocupaciones con dificultades, no de centenares de miles o de millones de personas, sino de una cuantía ostensiblemente inferior. En este momento, los diferentes colectivos que se jubilan anticipadamente son unos 200.000 o 300.000.

-”¿La reforma no está muy alejada de la doctrina socialista y más cercana a una concepción neoliberal de la economía?

-” En absoluto. La tradición del discurso socialista es tener instituciones que protejan a los más débiles, desde la cuna hasta la tumba, con educación gratuita, derecho a la vivienda, protección contra el desempleo, acceso a la sanidad y una pensión. Lo que hacemos ahora es fortalecer, garantizar esta parte del capítulo de protección social que caracterizó a los grandes consensos socialdemócratas de la postguerra mundial. El objetivo es consolidarlo porque ¿para qué sirve un sistema de pensiones de reparto que quebraría en quince años?

-” ¿Abre la puerta esta reforma a la financiación de las pensiones por vías diferentes a las cotizaciones?

-” La abre al análisis de una financiación complementaria, en el que hablemos que las prestaciones de carácter universal -“no contributivas-“ sean asumidas por el Estado en un acuerdo razonable a la vez que pueda haber esquemas de financiación complementaria del sistema público. ¿Por qué razón? Porque las cotizaciones sociales llevan muchos años asentadas entre el 9% y el 9,5% del PIB. Si en el futuro se va a gastar del 12% al 12,5% y las cotizaciones no se alteran-”y no debemos elevarlas en términos de PIB-”, lo normal es pensar que tendrá que haber fuentes de financiación alternativas en el medio y largo plazo. Esa es la reflexión que abrimos para después del año 2027, porque hasta ese momento no se va a necesitar financiación complementaria.

-” En la reforma se produce una mejora de la contributividad, lo que hará que algunos colectivos que se beneficiaban de una menor cotización salgan perjudicados.

-” El aumento del periodo de cómputo implica hacer más contributivo el sistema; también la jubilación a los 65 para los que tienen carreras más largas de cotización; lo mismo sucede al exigir más tiempo de afiliación para acceder a la jubilación parcial o anticipada.

-” En la reforma se produce una mejora de la contributividad, lo que hará que algunos colectivos que se beneficiaban de una menor cotización salgan perjudicados.

-” El aumento del periodo de cómputo implica hacer más contributivo el sistema; también la jubilación a los 65 años para los que tienen carreras más largas de cotización; lo mismo sucede al exigir más tiempo de afiliación para acceder a la jubilación parcial o anticipada. Toda la reforma se ha hecho en esa dirección: la de una mejor relación entre la aportación hecha y la prestación que se recibe. La compra de una pensión se dificulta muchísimo. -” Se veta en el acuerdo el acceso a los complementos de mínimos de los que se jubilen anticipadamente. ¿Sucede lo mismo con los que accedan a la prestación con 15 años de cotización, por ejemplo?

-” Sí, se mantendrán. Sin embargo, no tiene sentido conservarlos en los casos de jubilación anticipada. Y es que una novedad importante de la reforma es el retiro voluntario a partir de los 63 años, sin que se produzca un despido, con un coeficiente reductor, que será más pequeño cuanto más se haya cotizado. Esta medida tendrá poca incidencia en el régimen general, pero sí en el de autónomos, donde las bases de cotización mínimas están muy extendidas.

tracking