Ahorrar energía a costa de la Opep
Industria se empeña en convencer al resto de ministerios para conseguir daralas al negocio de los servicios energéticos para crear empleo sin dañar el déficit
La enorme factura energética que cada año paga España, un país dependiente al 80% de los recursos del exterior en este ámbito, es un lastre para la recuperación económica. Más, si cabe, ahora que el precio del petróleo está por las nubes, disparado por las tensiones en el mundo árabe. El Gobierno y, de forma especial el ministro de Industria, Miguel Sebastián, se ha empeñado en recortar el gasto y mejorar la eficiencia a través del impulso a un negocio poco desarrollado en España pero con un gran futuro: el de las empresas de servicios energéticos (ESE).
Y ha empezado el Ejecutivo por dar ejemplo. O, al menos, por intentarlo, con un plan de mejora de 330 edificios de la Administración Central. Lo llamativo es que, según Sebastián, ese ahorro no lo pagarán los españoles, sino los países de la Opep. «No pagan los contribuyentes, los únicos que pagan son los países productores de petróleo que dejarán de recibir parte de nuestro gasto», defendió Sebastián al presentar el primer proyecto de tan ambicioso programa, el de la mejora de su casa, el madrileño complejo Cuzco, que acoge a los ministerios de Industria y Economía.
La clave del aparente progreso sin coste es la forma de funcionar de las ESE, que realizan ellas mismas la inversión necesaria para acondicionar los edificios y recortar al máximo el consumo, y el cliente (en este caso, el Gobierno) no pone un euro. De este modo -”Elena Salgado no hubiera admitido ninguna otra fórmula, por mucho que se empeñara Sebastián-” el déficit del Estado ni se entera.
Javier Sigüenza, secretario general de la Asociación de Empresas de Mantenimiento Integral y Servicios Energéticos (AMI), asegura que las perspectivas para el sector «son muy buenas», y espera que «desaparezcan los miedos y las reticencias».
Sigüenza cree que cuando las ESE alcancen velocidad de crucero «generarán más empleo estable».