Moody´s sacude los mercados al situar a Grecia al borde del impago
Las bolsas abren con pérdidas por las turbulencias sobre Europa y EE.UU.
Grecia sigue recibiendo malas noticias pese al segundo plan de rescate diseñado por los socios del euro para salvar su economía. La agencia de riesgos estadounidense Moody-™s anunció ayer su decisión de degradar de un plumazo tres escalones la calificación de la deuda soberana del estado heleno -”desde Caa1 hasta Ca-” y situarla a un solo paso de la suspensión de pagos.
La nueva rebaja del -˜rating-™ griego volvió a sacudir los mercados en el inicio de una semana crucial para aclarar si la tranquilidad regresa a las bolsas o si harán falta nuevas terapias de choque. El Ibex 35 cerró con pérdidas y la prima de riesgo volvió a aumentar y alcanzó los 325 puntos básicos.
El golpe asestado por Moody-™s a la economía griega se suma al que ya le propinó el viernes pasado Fitch, otra de las grandes agencias de riesgos. Su decisión de incluir al estado heleno en uno de sus listados de pagadores menos fiables, los que han incurrido en lo que Fitch denomina un «impago restringido», estropeó la euforia compradora que había desatado en los mercados la solución diseñada en Bruselas y devolvió la presión y la volatilidad a los parqués.
A la espera. A falta de que la otra gran agencia mundial, Standard & Poor-™s, aclare si sigue los pasos de sus equivalentes o se convierte en el tercero en discordia, el anuncio de Moody-™s ha bastado para que las bolsas inicien su andadura semanal con nerviosismo. Demasiado desasosiego se respiraba ayerentre unos inversores muy inquietos ante la doble perspectiva de impagos a ambos lados del Atlántico. No hay que olvidar que Estados Unidos busca a la desesperada un acuerdo político para aumentar el techo de la deuda federal antes del 2 de agosto, fecha tras la cual el Estado ya no podrá hacer frente a sus obligaciones financieras.
En un informe publicado en su página web, Moody-™s justificó su decisión por la imposibilidad del estado heleno de reembolsar íntegramente los préstamos a sus acreedores privados. El motivo de fondo es que el segundo plan de ayuda de la zona euro incluye una ampliación de los plazos dados a Grecia para pagar los créditos, así como una rebaja de los intereses. El sector privado calcula que ese cambio de condiciones le acarreará pérdidas en el entorno del 21%, un porcentaje difícil de digerir.