Prohibir el pago de más de 3.000 euros en metálico aportaría 20.000 millones
Los técnicos de Hacienda, agrupados en Gestha, han aplaudido la propuesta de Rubalcaba de prohibir el pago en metálico de las facturas cuyo importe supere los 3.000 euros. Una idea que busca anular la picaresca y obligar a que el dinero deje un ‘rastro’ sencillo de seguir y, por tanto, de comprobar por Hacienda, cuyos técnicos estiman que aportaría cada año a las arcas públicas casi 20.000 millones de euros. La estimación presentada por Gestha supondría, según los técnicos, rebajar la denominada economía sumergida en unos 5,1 puntos porcentuales.