LOS EFECTOS DE LA CRISIS
El Eurogrupo aprueba el rescate bancario español de 100.000 millones
El primer tramo de 30.000 millones estará disponible a final de julio por si es necesaria una recapitalización urgente. La aprobación por el Parlamento finlandés de su contribución a la ayuda poco antes de la reunión despejo el último obstáculo
El Eurogrupo ha aprobado por unanimidad en una reunión celebrada por teleconferencia el rescate bancario español con una ayuda financiera europea máxima de 100.000 millones de euros. El primer tramo del préstamo europeo, por importe de 30.000 millones, estará disponible antes de finalizar julio por si es necesario una recapitalización de emergencia de una de las cuatro entidades intervenidas: Bankia, CatalunyaCaixa, NovaCaixaGalicia y Banco de Valencia. La aprobación por parte del Parlamento finlandés de su contribución al rescate poco antes del inicio de la reunión del Eurogrupo ha despejado el último obstáculo pendiente a la aprobación de la ayuda europea.
El memorando del rescate se ha aprobado sin cambios con la doble exigencia a España de cumplir sus objetivos de reformas y reducción del déficit y de efectuar una drástica reforma del sector bancario español.Las entidades intervenidas deben elaborar de inmediato un plan de reestructuración profundo con medidas para la reducción de tamaño, red de sucursales y volumen de negocio para presentarlo a la Comisión Europea, que debe aprobarlos a mediados de noviembre.
Reserva de 25.000 millones
El rescate europeo reservará unos 25.000 millones para financiar la sociedad de gestión de activos o 'banco malo', donde las entidades que reciban ayudas podrán segregar sus activos inmobiliarios problemáticos para limpiar su balance.
Los préstamos europeos, de cuya devolución se hace garante el Estado español, se concederán por un plazo de duración medio de 12,5 años, con un vencimiento máximo de 15 años en los más largos.
Los ministros de Economía y Finanzas de los demás países de la eurozona han subrayado en el comunicado oficial del Eurogrupo que el Gobierno debe cumplir sus compromisos de reducción del déficit y de aplicación de las reformas necesarias para corregir sus desequilibrios económicos. El cumplimiento de esas dos condiciones “será supervisado de forma estrecha y regular”, en paralelo con el cumplimiento de las exigencias específicas del sector bancario, advierte el comunicado oficial.