Más poder en la lucha contra el fraude para las territoriales de Trabajo

El Ministerio de Empleo ha dado otra vuelta de tuerca a su plan de lucha contra el fraude. La última medida adoptada ha sido la aprobación de una orden ministerial que refuerza las competencias de las direcciones territoriales de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social. A partir del pasado domingo –cuando entró en vigor la orden- los organismos territoriales «podrán desarrollar acciones sobre sectores, situaciones o empresas cuya actividad rebase el ámbito provincial y no exceda el de la Comunidad Autónoma», ha explicado el ministerio a través de una nota de prensa. Y añade que lo harán «sin incrementar los recursos humanos y materiales de que disponen».

Entre las nuevas tareas de inspección que a partir de ahora asumirán las direcciones territoriales están las de «perseguir el trabajo no declarado a la Seguridad Social y el fraude en la obtención de prestaciones del sistema; velar por el cumplimiento de la obligación de cotizar, y combatir el uso fraudulento de bonificaciones o reducciones de cuotas».

Hasta ahora, las inspecciones provinciales de Trabajo y Seguridad Social se encontraban con problemas a la hora de investigar infracciones cometidas por empresas que disponían de otros centros ubicados en una provincia distinta. Con la entrada en vigor de la nueva orden ministerial «los inspectores y subinspectores adscritos a las direcciones territoriales pueden extender su actividad a todo el territorio de la comunidad autónoma».

La asignación de estas nuevas funciones está en línea con el objetivo de combatir el trabajo no remunerado y el fraude a la Seguridad Social.