está dispuesto a participar
BBVA ve "difícil" que inversores internacionales entren en el 'banco malo'
Pronostica que BBVA comprará "inevitablemente" alguna entidad y que solo quedarán diez en España en un año
El presidente de BBVA, Francisco González, considera "difícil" que los inversores internacionales entren en el capital del 'banco malo' y ha expresado su disposición a hacerlo, a falta de conocer los detalles de esta sociedad de gestión de activos a la que las entidades nacionalizadas traspasarán sus activos inmobiliarios dañados.
González sostuvo que BBVA está abierto a transferir activos y meter capital en este vehículo "en beneficio del banco y de nuestro país". "Hay que ser muy realista: el capital internacional no va a entrar aquí fácilmente. Tenemos más conocimiento y capacidad para tomar decisiones y más sentido de la realidad. Por tanto, creo que BBVA y todos los bancos fuertes estarán abiertos" a participar en el 'banco malo', argumentó.
El presidente de BBVA consideró necesario que las entidades financieras busquen los intereses de España como fórmula de obtener rendimiento propio. "Espero que las cosas se hagan de forma más inteligente, en beneficio de España", dijo González, que participó en un encuentro organizado por Deloitte y ABC ante un nutrido grupo de empresarios y políticos de primera fila.
En cualquier caso, González recordó que aún se desconoce qué estructura tendrá el 'banco malo', qué activos se le transferirán y quiénes serán sus dirigentes, detalles de gran relevancia que deberán figurar en el reglamento de desarrollo de este instrumento, incluido como una de las condiciones del memorando de entendimiento (MoU) sellado con la UE para acceder al rescate financiero por 100.000 millones de euros.
Sobre el informe de Oliver Wyman que desvelará las necesidades de capital de la banca española entidad por entidad en un panorama muy oscuro y que servirá de base para que España concrete a la UE el importe de la solicitud del rescate financiero, González opinó que se trata de un ejercicio de enorme transparencia, único en el mundo. "Será bueno", sostuvo.
El banquero dijo desconocer el proceso de reuniones entre responsables de la consultora independiente y del Banco de España para abordar los detalles de las pruebas de resistencia aplicadas a la banca de forma individualizada y cuyos resultados verán la luz oficialmente el próximo 28 de septiembre, si bien incidió en que BBVA sabe "dónde está".
A falta de conocer dichos números sobre la capacidad de resistencia de las entidades ante un escenario económico muy estresado, el sector financiero vivirá un nuevo proceso de concentración que reducirá a diez el número de entidades existentes en el plazo de un año y en el que BBVA participará, pronosticó. "Será inevitable que participemos en una operación", dijo González, para matizar a renglón seguido que la entidad "lo hará con mucho gusto".
Sobre el futuro de las entidades nacionalizadas por el Estado y que recibirán con toda probabilidad recursos del fondo de rescate europeo (Bankia, Novagalicia, CatalunyaCaixa y Banco de Valencia), el presidente de BBVA se mostró optimista. "Creo que cuando uno ve en detalle lo que está pasando en el sector financiero (el resultado) va a ser mucho mejor de lo que la gente cree", respondió.
González reconoció que algunas de las prácticas comerciales para captar pasivo de estas entidades fruto de la fusión de cajas de ahorros pueden interpretarse como "competencia desleal", un comportamiento ante el que el resto de entidades sin presencia pública en su accionariado solo puede protestar. "Eso es lo que podemos hacer", acotó.
Comportamientos fraudulentos en las cajas
No obstante, el presidente del BBVA denunció la existencia de comportamientos fraudulentos en cajas de ahorros y exigió que se diriman las responsabilidades para impedir que vuelvan a suceder. "Hay algunas que lo han hecho muy mal" y ha habido "comportamientos fraudulentos en muchas de estas entidades", aseveró.
González también abogó por reconocer que ha habido deficiencias de regulación y supervisión en el sistema financiero español, especialmente en las cajas, y apostó por que desaparezcan las entidades que no son viables. En cualquier caso, sostuvo que el sistema financiero español está dominado por entidades muy sólidas y que el 30% del mismo es el que concentra el 80% de las necesidades de respaldo público.