El Gobierno propone retrasar en dos años la jubilación anticipada
Ayer empezó el camino que conduce a un endurecimiento de la jubilación anticipada y de la jubilación parcial. El secretario de Estado de la Seguridad Social, Tomás Burgos, acudió a la Comisión del Pacto de Toledo en el Congreso de los Diputados para abrir el debate sobre las reformas que propone el Gobierno.
Aunque no se concretó sí dejó traslucir que la intención del Ejecutivo es retrasar dos años la edad de jubilación anticipada como se hizo con la jubilación ordinaria que pasa a los 67 años a partir del 2027 tras un periodo transitorio. Es decir, que el Ejecutivo quiere que pase de 61 a 63 años la jubilación anticipada en caso de despido y de 63 a 65 años cuando sea voluntaria, según fuentes del Ministerio de Empleo.
La reforma de las pensiones que entra en vigor el próximo 1 de enero ya retrasa de 61 a 63 años la edad para la jubilación anticipada, salvo en los despidos forzosos que se acordó en 61 años. El Gobierno no plantea modificar la situación de la jubilación anticipada en los trabajos penosos o peligrosos ni para los trabajadores con discapacidad. Los cambios no se aplicarán a las personas despedidas o afectadas por ERE, convenios colectivos, acuerdos de empresa o procedimientos concursales aprobados con anterioridad al 1 de agosto del 2011, cuando se publicó la ley de reforma de las pensiones que entra en vigor en el 2013. Pero sí les sería de aplicación el ajuste en los coeficientes reductores de la pensión que el Gobierno también quiere endurecer. Respecto a los empleados públicos, el informe del ministerio insta a valorar que no se les permita la jubilación anticipada.
Economía y empleo
El BCE ignora al Gobierno y rechaza fijar un tope para la prima de riesgo
Redacción