Los directivos del ‘banco malo’ cobrarán un máximo de 500.000 euros

Recta final para el banco malo, con redoblados esfuerzos para captar a inversores implicados. Cinco grandes bancos de inversión colaborarán con el Frob para atraer fondos extranjeros. Aunque no se consideran necesarios, fuentes del Ministerio de Economía defienden la participación exterior como una forma de aumentar la credibilidad del proyecto.

Ya se han propuesto oficialmente los nombramientos de la cúpula del equipo gestor —Belén Romana, presidenta, y Walter de Luna, director general—, que no podrán cobrar, cada uno de ellos, más de 500.000 euros anuales, la cifra tope de retribución de los bancos que reciben ayudas.

Otros ejecutivos han sido seleccionados por una sociedad ‘cazatalentos’. Para cumplir los requerimientos de Bruselas se considera preciso que en el mes de diciembre esté constituida la sociedad con el capital necesario, al menos, para que se produzca la transferencia de los activos desde las cuatro entidades nacionalizadas. Por esas fechas, el volumen de recursos propios previsto —8% de un importe gestionado que se estima en unos 48.000 millones— debe ascender a 3.900 millones. Sobre esa cantidad, para que al menos el 55% corresponda al sector privado, estos inversores debieran aportar unos 2.200 millones. Más adelante, cuando se añadan los activos de otras entidades y los activos gestionados superen los 60.000 euros, los recursos propios se elevarán a 5.000 millones Y se sigue manteniendo la apuesta de que un 10% del capital total lo proporcionen fondos extranjeros.

Parece confirmada la participación de Banco Santander, en tanto BBVA estudia esa opción, y fuentes del sector apuntan que Banco Sabadell y Caixabank también se decantarán por entrar en la Sareb. Habrá que actuar con la máxima transparencia y cuidado, porque estas entidades, como el resto, tienen su propio negocio inmobiliario y pueden acceder a información sensible sobre la estrategia del banco malo.