La Fiscalía se querella contra el juez Silva por la detención ilegal de Blesa
También le acusan de prevaricación y de retardo en la administración de justicia.
El controvertido juez Elpidio José Silva, instructor del llamado ‘caso Blesa’, tiene un futuro profesional bastante oscuro, una vez que la Fiscalía abrió ayer el camino para expulsarle de la carrera judicial. La herramienta para ello es una querella presentada ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, donde se le acusa de hasta cuatro delitos concretos, uno de prevaricación (dictar resoluciones injustas a sabiendas), otro de retardo malicioso en la administración de justicia y dos de detención ilegal por ordenar el encarcelamiento del citado Miguel Blesa, ex presidente de Caja Madrid.
La situación no ha sorprendido al protagonista, pues él mismo mostró días atrás de forma enigmática «cierta preocupación por las cosas que están pasando y la forma en que se están produciendo». Fue el 26 de junio y, aunque decía no tener «miedo», sí rumiaba ya la posibilidad de que se presentará una querella. Eso sí, pensaba entonces que el promotor sería el propio Blesa, aunque también el Ministerio Público había advertido de esa posibilidad tras las diligencias de investigación que abrió en su día a raíz de una denuncia de los abogados del ex financiero por sus particulares métodos.
Y es que, según la Fiscalía de Madrid, lejos de obrar «conforme a Derecho», y «consciente» de que no podría obtener sus frutos de otra forma, «impuso su propia voluntad, su deseo o su criterio sobre la interpretación racional de la ley». Abundando en esta severa acusación, desde el Ministerio Público estiman que sus actuaciones supusieron «una total colisión con las normas aplicables», desde la Ley de Enjuiciamiento Criminal hasta el Código Penal, pasando por la Constitución.
Y es que uno de los principales reproches que se le hacen al juez en la querella es que vulneró varios derechos fundamentales de Blesa sin que hubiera un soporte jurídico que lo argumentara. Desde el propio inicio del procedimiento hasta las diligencias que ordenó, pasando por el doble encarcelamiento del ex financiero, primero eludible con una fianza de 2,5 millones de euros y luego incondicional.
Sin base jurídica
Para la Fiscalía, el titular del Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid no motivó la mayoría de sus resoluciones en este caso. Hasta el punto, según ella, de prolongar su forma «arbitraria» de actuar para no tramitar recursos de las defensas o quedarse irregularmente con otra causa «sin conexidad» (la compra de un banco en Florida por Caja Madrid). Las penas previstas para los delitos que el Ministerio Público imputa a Silva implicarían su expulsión de la judicatura en caso de ser condenado, a semejanza con lo que ya ocurrió con Baltasar Garzón en febrero de 2012.