LEY DE EMPRENDEDORES
Toda la oposición en el Senado, salvo CiU, veta la ley de emprendedores
Todos los grupos de la oposición en el Senado, salvo CiU, han presentado propuestas de veto al proyecto de ley de apoyo a los emprendedores y su internacionalización, que mañana serán debatidos y votados en la Comisión de Hacienda de la Cámara Alta.
En total son 6 vetos, uno del grupo socialista, otro del grupo vasco, dos del grupo mixto (IU y ERC) y otros dos de la Entesa (PSC e ICV).
Asimismo, se han registrado 413 enmiendas al articulado de la norma, que también serán debatidas mañana, de las que 3 son del PP, 82 del PSOE, 112 de CiU, 115 de la Entesa, 43 del PNV y 58 del grupo mixto.
El grupo socialista ha vetado el proyecto de ley por considerar que tiene un escaso alcance para dinamizar la actividad emprendedora y que es "una medida propagandística más del Gobierno".
En su opinión, no aborda las cuestiones fundamentales a las que se enfrentan los emprendedores, como problemas de regulación, competencia y, sobre todo, de acceso a la financiación, que están "ahogando a miles de pymes y autónomos".
El PSC cree que el texto no cumple con los requisitos mínimos que se deben exigir al Gobierno en una situación económica "tan dramática", en la que casi la única opción para los desempleados está en emprender por su cuenta y generar nuevos proyectos empresariales.
A su juicio, la norma no ofrece el apoyo y la cobertura mínima que el Ejecutivo debería garantizar a los nuevos emprendedores.
El grupo vasco fundamenta su veto en la cuestión competencial, ya que cree que el proyecto supera "ampliamente" las competencias del Estado en los ámbitos que trata.
También lo cree así ERC, que en su veto incide además en que la ley obvia por completo los emprendedores sociales, de los que pone como ejemplo a las cooperativas, que cree que también deberían disfrutar de los beneficios fiscales establecidos en la norma.
Para IU e ICV, que han presentado el mismo texto para justificar su veto, la norma es "confusa y técnicamente defectuosa".
Además, ven un error de diagnóstico por parte del Gobierno al pretender que la "solución mágica" para la crisis del desempleo pase por un cambio de mentalidad en el que la sociedad valore más la actividad emprendedora y la asunción de riesgos.