La CE recomienda a España subir el IVA, bajar cotizaciones y detallar ajustes
En sus pautas macroeconómicas incide en corregir los desequilibrios presupuestarios .
El presidente de la CE, José Manuel Barroso.
La Comisión Europea (CE) recomendó ayer de nuevo a España que suba el IVA o los tributos medioambientales, rebaje las cotizaciones sociales a la Seguridad Social y detalle los ajustes para reducir el déficit en 2015 y 2016.
El Ejecutivo comunitario sostiene además que España deberá, si la coyuntura es buena y tras corregir su déficit excesivo en 2016, aplicar un ajuste estructural «no inferior al 0,5% cada año, e incluso mayor» para situar la deuda por debajo del 60% del PIB.
La CE dio a conocer sus recomendaciones macroeconómicas anuales por países, en las que decidió cerrar el proceso abierto que tenía para seis países y pidió a Francia más esfuerzos reformistas y aplicar más recortes a su gasto público.
En el plano presupuestario, la CE sostiene que España debe reforzar la estrategia presupuestaria a partir de 2014, «especificando plenamente las medidas subyacentes para 2015 y los años posteriores, con objeto de lograr corregir el déficit excesivo de manera sostenible en 2016 (2,8% del PIB)». En este sentido, el Ejecutivo comunitario recuerda que la corrección de los desequilibrios presupuestarios «exige aplicar de manera creíble ambiciosas reformas estructurales que permitan incrementar la capacidad de ajuste e impulsar el crecimiento y el empleo».
La CE recomienda al Gobierno que realice antes de febrero de 2015 una «reducción sistemática del gasto en todos los niveles de la Administración».
En cuanto la reforma fiscal anunciada por España, el Ejecutivo comunitario considera que ésta debe estar adoptada antes de fin de año e insiste en sus recomendaciones anteriores. La reforma debe «trasladar la imposición hacia tributos menos distorsionadores» como los que gravan el consumo (IVA) o el deterioro del medio ambiente, por ejemplo sobre los combustibles, o los impuestos sobre bienes inmuebles.
Igualmente recomienda eliminar los gastos ineficientes en el impuesto de sociedades y el IRPF y «considerar la posibilidad de reducir las cotizaciones empresariales a la Seguridad Social», en particular para los salarios más bajos.