El dinero para obra social de las cajas se reduce a la mitad durante la crisis
La crisis ha pasado una factura severa a la partida que las cajas de ahorros dedican a la obra social, hasta reducirse incluso a la mitad. En concreto, se ha pasado de los 1.280 millones de euros -cuando se hablaba de dar el 25% del beneficio- que se destinaron a este fin en 2008 a los apenas 650 millones que se dedicaron el pasado ejercicio. Y si nos remontamos a 2007, la caída acumulada supera incluso el 70%.
Según los datos de la patronal Ceca, la única entidad que ha mantenido una inversión similar ha sido La Caixa, que el año pasado invirtió 500 millones. Otras fundaciones -la fórmula en la que se han reconvertido una treintena de las antiguas cajas tras desligar su negocio bancario-, como Caja Madrid, han reducido hasta ocho veces su aportación, que apenas llega a 30 millones.
La mayoría del presupuesto se destina a proyectos de acción social (ayuda a discapacitados, comedores sociales, reinserción de personas con problemas…), que recibieron en 2013 casi la mitad de los fondos (305 millones).