Un juez dice que el caso Bankia no afecta a los que compraron acciones en OPS
Un juez de Madrid se ha negado a anular un contrato de compra de acciones de Bankia durante la Oferta Pública de Suscripción (OPS) en julio de 2011 porque en «nada afecta» el caso penal abierto en la Audiencia Nacional sobre presuntas irregularidades en la salida a bolsa de la entidad.
El titular del Juzgado de Primera Instancia número 68 de Madrid ha desestimado una demanda que interpuso un matrimonio contra Bankia en la que reclamaba la nulidad del contrato por el que invirtió 1.680 euros en acciones antes de la salida a bolsa de Bankia el 20 de julio de 2011, amparándose en el caso que instruye el juez Fernando Andreu y otras causas sobre preferentes.
La sentencia subraya que «en nada condiciona, influye o afecta» estos casos a su decisión, que circunscribe a la de dilucidar si hubo un error en el consentimiento a la hora de suscribir las acciones.
Aclara que no es su misión resolver si la OPS «cumplió todos y cada uno de los requisitos legales establecidos y sometidos al control del órgano regulador competente», ni la de conocer si las cuentas estaban bien formuladas o si el auditor cumplió con sus obligaciones.
«Todo se escapa, afortunadamente, de nuestro control», dice el magistrado, que añade que «si alguien considera» que todos aquellos le causaron daño, acuda a otra vía para reclamar una indemnización.
Campaña de 2011
Nada tiene que ver la OPS con los «infinitos» expedientes sobre preferentes que «inundan» los tribunales españoles, y «hasta el más olvidadizo es capaz de recordar por pública, notoria y abusiva la campaña de publicidad que nos invadió a mediados de 2011 con ocasión de tal oferta», que «hoy haría enrojecer a más de uno».
Sin embargo, el juez no olvida la conducta de los administradores del banco que, al margen de la calificación jurídica que se pueda dar a su actuación en la causa penal, debe ser tachada como «propia de los más absolutos incompetentes imaginables», ya que no solo han provocado la «ruina» de la entidad, sino que han «condenado a la ciudadanía a la pérdida de más de 20.000 millones de euros».
Además, los demandantes dirigen su acción contra Bankia, que es la «primera víctima de sus órganos de gobierno y administración», pero también afecta a los consejeros de su matriz, BFA, titular de su capital social.